martes, 20 de noviembre de 2012

Nada que hacer: los presidenciables de la derecha no le hacen caso a Piñera. Allamand y Golborne siguen como el perro y el gato

Equipo Cambio21
"No da lo mismo tener un candidato competitivo que uno testimonial", le dijo Golborne (UDI) a Allamand (RN), quien luego contestó: "No me voy a hacer cargo de ninguna declaración que pueda resultar ofensiva o y que demuestre un cierto un dejo de arrogancia". Piñera intervino.
Sea en Chile o en el extranjero, los llamados al orden que le ha lanzado el mandatario Sebastián Piñera a los precandidatos presidenciales de la derecha, Laurence Golborne (UDI) y Andrés Allamand (RN), no han tenido eco.

Luego de un inicio de campaña para las primarias (post salida del gabinete) marcado por las críticas de Allamand a la "experiencia empresarial" de Golborne (por su pasado en la gerencia de Cencosud), lo que fue retrucado por el ex titular de Minería y Obras Públicas ("aprendo política rápido"), fue Piñera quien efectuó el primer "tirón de orejas" sobre el posible "conflicto irreversible" que podría tener en el sector un debate fuerte y personalizado entre los respectivos abanderados.

Sin embargo, estando el jefe de Estado en plena gira internacional por Europa, otra vez los contendores volvieron a "tocarse la oreja".

Por ejemplo, Golborne fue proclamado el sábado pasado por la UDI, instancia en la que señaló que "no da lo mismo tener un candidato competitivo que uno testimonial".

El palo fue para Allamand, que respondió desde Chillán: "Participaré en esta primaria con el mayor espíritu unitario y no me voy a hacer cargo de ninguna declaración que pueda resultar ofensiva o y que demuestre un cierto un dejo de arrogancia. Obviamente es una expresión poco amistosa".

Con cara de pocos amigos, Piñera tuvo que referirse al tema desde Turquía. "Una candidatura no es para enfrentarse uno con el otro, sino para proponer, convocar y entusiasmar a los chilenos", indicó.

Después del reto, Golborne respondió: "Entiendo la legítima preocupación del presidente, pero ciertamente queremos marcar las diferencias entre los candidatos que tiene la coalición y tenemos que hacer ciertas diferencias y ciertos planteamientos, siempre con altura de miras y mucho respeto. Lamento si esa impresión se pudo haber dado, porque la intención justamente es que elijamos en un proceso de primarias, competitivo, respetuoso, al mejor abanderado de nuestro sector. Tenemos claro que quien sea el segundo en este proceso debe apoyar con entusiasmo a quien resulte ganador".

Desde la derecha se lo tomaron con humor. De hecho, el senador de RN Alberto Espina pidió no tomarle tanta importancia al asunto. "Cuando salieron esos dichos miré las cadenas de televisión internacionales para ver si se había producido alguna conmoción ciudadana en las calles o alguna revuelta, y no encontré ninguna", ironizó.

A ver si a partir de ahora se calman los ánimos. Mientras tanto, el analista Patricio Navia da un buen consejo a través de Twitter: "En 2005, cuando la campaña de primarias de la Concertación se puso tensa, Bachelet y Alvear se tomaron un café. Golborne y Allamand deberían hacer lo mismo".

FUENTE: CAMBIO 21

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