Primarias en la derecha: ¿En que quedó la millonaria y descuadrada billetera de la UDI?
Por Javier Insulza
Oficialmente, la propaganda electoral en las primarias comenzaba el 1 de mayo, pero nadie duda que Ena Von Baer e Iván Moreira hace rato que la estaban haciendo para una elección...que no fue.
Recién por estos días se han comenzado a inscribir los candidatos que irán a elecciones primarias el próximo 30 de junio, pero la discusión sobre el gasto electoral para esta elección ya está cobrando fuerza.
Desde luego el tema no es nuevo, pero cada vez que se acerca el período de elecciones resurge la polémica sobre cuánto gastar y cómo logran los candidatos financiarse.
Es cierto que en el último tiempo esto se ha ido intentando mejorar e incluso se ha establecido montos para gastar en campañas , el que ha sido definido según la cantidad de votantes por zona, sin embargo, los candidatos, especialmente los de derecha, suelen usar un sinfín de resquicios legales que les permiten gastar más de lo legalmente permitido.
Ni hablar de lo que ocurre en la guerra desatada que sostienen la actual senadora por Santiago Oriente, Ena Von Baer, quien reemplazó al hoy ministro de Economía, Pablo Longueira, y el diputado por La Cisterna, Iván Moreira. Y eso que se trata solo de las primarias.
La campaña ente Moreira y Von Baer se ha ubicado como el ícono del excesivo gasto en publicidad electoral, incluso antes de que comience el período legalmente establecido de dos meses, el que parte este 1 de mayo. Esta campaña sólo estaría siendo superada por la senatorial por Santiago Oriente de 1997, cuando, de acuerdo a datos de la época, el candidato UDI Carlos Bombal invirtió 15 millones de dólares para derrotar al hoy presidenciable de RN, Andrés Allamand.
De hecho, hace unos días se pudo ver avisos publicitarios de Ena Von Baer apoyando al destituido ministro de Educación, Harald Beyer. Los expertos estiman que la actual senadora invirtió una cifra cercana a los 62 millones de pesos en la publicidad que realizó durante el fin de semana del 20 y 21 de abril, incluyendo los insertos en los que agradecía a Beyer.
De esta forma, surgen las sanas dudas sobre ¿cuánto debe gastar un candidato en una primaria y cómo se financia esto?
Desde el Servel
La primera duda es sobre cuánto se puede gastar en publicidad para las primarias, desde cuándo y hasta cuándo está permitido.
Según la Ley 20.640 sobre elecciones primarias en Chile, “a las elecciones primarias les serán aplicables las disposiciones contenidas en la ley sobre campañas electorales”, de 2003 y se entenderá por período de campaña electoral “aquel comprendido entre el día que venza el plazo para declarar candidaturas para elecciones primarias y el de la elección primaria”.
Y es el mismo cuerpo legal el que informa que “los límites al gasto electoral que se aplicarán en el caso de las elecciones primarias serán equivalentes al 10% de los valores señalados en el artículo 4° de la ley N° 19.884, según el tipo de elección”, y agrega que “en el caso de los candidatos nominados, el monto del gasto electoral efectivamente realizado por el candidato se rebajará del gasto máximo autorizado para la elección respectiva”.
Así las cosas, en las parlamentarias del año 2005 en la circunscripción de Santiago Oriente, el Servel fijó un límite cercano a los 700 millones de pesos, es decir, si hubiesen existido primarias cada candidato podría haber gastado 70 millones de pesos. En el caso de la actual elección, aún no se establece el monto final, por lo que no se puede saber qué cantidad se podrá destinar a las primarias.
Como para esta elección se espera que el gasto aumente a raíz de tener un padrón más grande dado por la inscripción automática, eso afectará de forma directa a las primarias.
Y se debe considerar que un candidato que resulte vencedor de la primaria deberá contemplar el dinero utilizado en la primaria como parte de su total permitido para la campaña definitiva.
Pero el período para campaña electoral comenzó el 1 de mayo y nadie duda que Ena Von Baer e Iván Moreira están realizando un trabajo publicitario más que anticipado. De esta forma, los 62 millones de pesos que gastó la actual senadora en un fin de semana no serán contabilizados dentro de los dineros que puede utilizar en campaña porque no se encuentra dentro del período legal establecido y, además, no llama a votar, siendo que implícitamente se entiende que es parte de su estrategia electoral.
La fórmula utilizada por Von Baer recuerda a lo hecho por el diputado Ernesto Silva Méndez en su campaña a diputado por Las Condes hace 4 años. Como el candidato era poco conocido, comenzó dos años antes de la elección a instalar carteles con su nombre y así poder presentarse en la zona. A la fecha nadie sabe quién pagó esa publicidad y como no decía nada de elecciones no pudo ser contabilizada en los registros de gastos de la candidatura.
Una segunda derivada está dada por la diferencia del tiempo entre período electoral y el de la propaganda electoral.
Ya está dicho que el primero dura dos meses y va desde que se inscriben hasta el día de la elección, pero el segundo sólo es de poco menos de un mes, pues partirá el 1 de junio y podrá realizarse hasta dos días antes de la primaria, tal cual suele ocurrir en todas las elecciones chilenas.
En conversación con Cambio21 el integrante del Consejo Electoral, Patricio Santamaría, explicó que “la interpretación judicial de que solo es propaganda cuando se incluye referencia a votar por alguien es demasiado extensiva y, en rigor, la propaganda es el mecanismo de inducción para algo y no solo pedir que voten por uno. Sería mejor algo más restrictivo que ayude a reducir los dineros que se gastan en política que no permitan buscar subterfugios”.
Ossandón se queja
Más allá de la primaria, viene la elección de noviembre. Quien gane el 30 de junio deberá enfrentar a un nuevo candidato, el cual no necesariamente pasa por primarias.
Eso ocurrirá en la derecha en la elección senatorial de Santiago Oriente. El que allí gane la primaria, Von Baer o Moreira, llevará un camino recorrido frente a su rival, el vicepresidente de RN Manuel José Ossandón.
Cambio21 contactó al ex alcalde de Puente Alto quien, al parecer, no está enterado en profundidad del contenido de la ley de primarias sobre gasto electoral, puesto que ha pedido insistentemente que se regule algo que ya está hecho, más allá de los subterfugios ya mencionados y conocidos.
“No me siento disminuido, pero se ha visto un despliegue de recursos impresionante de papelería, mensajes por teléfonos celulares y fijos, insertos en diarios y gigantografías. Es una campaña grande para ser sólo una simple primaria”, alegó Ossandón en declaraciones a nuestro medio.
Pero aunque Ossandón no se sienta disminuido, el punto está instalado.
¿Quién los financia?
Otro punto que está en la polémica es el de los financistas.
"Estamos en un escenario en que se está luchando por un sueldo mínimo que sea superior a 205 mil pesos o en el caso del dólar bajo que está matando los pequeños agricultores, y por otro lado se gasta tal cantidad en campañas", explicó el diputado Pablo Lorenzini.
En diálogo con este medio agregó que "aquí también entra la sospecha de quién financia las campañas, porque dudo que El Mercurio o La Tercera sean gratis. Lo que hemos estado viendo hasta ahora es grosero y uno comienza a entender porque la ciudadanía tiene tanta distancia del mundo parlamentario".
Lo cierto es que la gran mayoría de los chilenos ve la propaganda pero son muy pocos los que se encargan de averiguar quién y cómo financia esas campañas y todo ello genera un margen razonable de dudas sobre quien paga esas grandes sumas que se invierten cada cuatro años.
Expertos electorales y publicitarios explicaron a Cambio21 algunas de las modalidades que existen para que los privados realicen grandes aportes a las campañas electorales.
Una fórmula es que hay empresas que alcanzan convenios de avisaje con los medios por todo el año y lo que hacen es “regalarle” uno de sus avisos al candidato al que quieren ayudar.
Incluso en el informe de Contraloría sobre las irregularidades en la Municipalidad de Providencia en los tiempos de Labbé, dado a conocer en exclusiva por Cambio21, se explica que el ente fiscalizador estableció como incorrecto la forma en la cual se había contratado los servicios de publicaciones Lo Castillo, empresa vinculada a El Mercurio.
Los especialistas explican que el nivel de ayuda hacia uno u otro candidato estará dado por el compromiso que tenga o haya tenido durante su gestión con los proyectos de ley en los cuales se podía ayudar o perjudicar a dichas empresas.
Fuentes UDI admiten que las Isapres y las AFP realizan grandes aportes a sus campañas y ello explica que los parlamentarios del gremialismo sean quienes más defienden los intereses de esas empresas en el parlamento.
Otro rubro que realiza fuertes aportes de dinero a las campañas políticas es el del tabaco y ello explicaría porque la ley que restringió su consumo en lugares públicos demoró tanto en salir.
Pero sobre el espacio que existe mayor manto de duda es sobre los dineros publicitarios del gobierno.
En reiteradas oportunidades Cambio21 ha denunciado el despilfarro del dinero en publicidad, el que asciende a 5 millones de UF durante 3 años, los que se cumplen en octubre de este año, sin embargo, nadie asegura que no se esté utilizando el mismo modelo para triangular campañas con miras a las elecciones de octubre y noviembre próximo.
Cabe recordar que a febrero de 2012, cuando ya se habían cumplido 18 meses de la entrada en vigencia del convenio marco de publicidad del gobierno, éste había gastado menos de un millón de los 5 millones de UF que tienen autorizados.
De esta forma, en la oposición admiten estar preocupados por la posibilidad de que el Ejecutivo, en medio de la desesperación por la debacle electoral que se le avecina opte por realizar compromisos de gastar ese dinero en triangulaciones para apoyar a los candidatos de la derecha.
De cualquier modo, no todo lo puede comprar el dinero. El despliegue que ha comenzado a realizar la derecha ya lo vimos en las municipales pasadas. Fueron precisamente los alcaldes de grandes comunas como Providencia y Ñuñoa quienes invirtieron más en publicidad y de poco les sirvió; mientras Sabat estuvo a punto de ser derrotado y ganó sólo por secretaría, Labbé debió abandonar el palacio Falabella e irse a los cuarteles de invierno.
FUENTE: CAMBIO 21
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