martes, 2 de abril de 2013

Los 10 actores sociales que están cambiando Chile (y una sola gran demanda)

Prácticas y políticas de los que fueron y los que serán
Desde la sorpresiva explosión social de Aysén, hasta el revuelo de los últimos días de 2012 por el conflicto chileno-mapuche, el año pasado estuvo marcado por el reflujo del movimiento estudiantil, pero también por el florecimiento de movimientos sociales, regionales y nacionales que vienen planteando, junto con sus reivindicaciones particulares, muchos puntos que van confluyendo en una agenda política unitaria y propia.
Aysén: Cuando una barricada es justa y necesaria
En pleno receso de vacaciones, todo Chile supo que Aysén era más que lindos parajes o el proyecto Hidroaysén. Sin mayor preámbulo, la frase “Tu problema es mi problema” hizo que el país conociera a sus aguerridos habitantes y solidarizara con sus demandas, a pesar de las imágenes que llegaban por los medios de comunicación que resaltaban las barricadas y piedras desperdigadas en los puertos o calles sureñas.
¿Por qué? Los patagones validaron aquellas circunstancias en que una barricada o acción directa tiene sentido y surte efectos, planteando un camino que seguirían otros movimientos durante el año, para encontrar visibilización a sus demandas. Pero, sobre todo, porque fueron más allá y llevaron a cabo por unas semanas el autogobierno de la ciudad, decidiendo quién entraba, quién salía y cómo se ordenaban internamente. Ensayaron el poder popular casi sin quererlo, como una respuesta refleja a lo que estaban viviendo.
Muchas imágenes, frases y nombres nos dejaron los patagones. Entre ellos destacan el locuaz Iván Fuentes, las heridas de Teófilo Haro, el duro pescador Honorino Angulo, las noches de vigilia escuchando los despachos de Claudia Torres y el tímido trovador Nicasio Luna, quien decía en el Teatro Caupolicán en Santiago que “un par de malparidos no pueden ganarle a un pueblo”.
Caimanes: David contra Goliat no es sólo un cuento bíblico
El pequeño pueblo de Caimanes se ubica a 45 km al interior de Los Vilos, en el valle de Pupío, provincia del Choapa, donde sus habitantes viven asediados por un tranque de relaves mineros a escaso kilómetros de sus viviendas. Su lucha se remonta a por lo menos 10 años atrás, pero ésta se agudizó en 2012, cuando se vieron envueltos en un juicio contra la Minera Los Pelambres, propiedad del grupo Luksic, la que acusó a los abogados de la comunidad de prevaricación, asociación ilícita, subscripción engañosa de documentos, además de desórdenes públicos en el caso de Cristián Flores.
¿Por qué? En concreto, la minera acusó a los defensores de la comunidad de haberse coludido para chantajear a la empresa con fines económicos, lo que fue finalmente desacreditado por el Tribunal Oral de Ovalle. Esto dejó muy satisfechos a los abogados que se vieron envueltos en el litigio, pero insistieron, así como la comunidad, que el problema de fondo es ambiental, por la amenaza del tranque de relaves “El Mauro” que, además, habría afectado 500 petroglifos ubicados en la zona. Esta lucha de Caimanes sigue en pie.
Aces: Ser joven y revolucionario
Una tímida jovencita pelirroja asumía ya en el verano de 2012 el relevo en la vocería de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces), y también el protagonismo que Camila Vallejo tuvo en 2011. Con orientaciones políticas distintas a la líder universitaria y sin un aparato político detrás, más que el ímpetu y apoyo de los propios secundarios, Eloísa González logró atraer simpatías y odiosidades en todo el espectro social, coronado con la campaña antielectoral de octubre, en que participó activamente, #Yonoprestoelvoto.
¿Por qué? Por encarnar en su vocería la rebeldía juvenil con sentido de miles de estudiantes secundarios que, a pesar de la falta de estímulos para su formación política, dieron con gran coraje en muchas ocasiones, cátedras de política y convicción a sus padres, abuelos y a los políticos profesionales. Además, la Aces es paradigmática, porque en palabras de la propia “Elo”, al ser emplazada por el director del Injuv, Felipe San Martín, ella no es quien llamaba a no votar, sino que sólo era vocera de procesos internos de la organización que la mandataban a levantar esa propuesta, es decir, pone de relieve el carácter colectivo de estas prácticas políticas.
Modatima: Sin agua no hay vida
La demanda de los habitantes de Petorca en la Quinta Región sólo logró saltar a los grandes medios cuando su secretario, Rodrigo Mundaca, fue acusado de injurias por el empresario y político DC, Edmundo Pérez Yoma, quien fuera dos veces ministro de Defensa de Frei Ruiz-Tagle y titular de Interior de Michelle Bachelet, desde 2008 a 2010. Los petorquinos dicen que viven sin agua a causa de los drenes subterráneos ilegales utilizados para regar las plantaciones de paltos que cubren los cerros de la zona.
¿Por qué? Los petorquinos denuncian que el conflicto fundamental que mantiene a la zona en una dramática sequía, se debe a la usurpación de aguas con fines privados que Pérez-Yoma y otros empresarios locales han llevado a cabo durante los últimos años. El problema no es menor, ni sucede únicamente en la comuna, sino que el acaparamiento de aguas es incluso una preocupación de la ONU, que ha denunciado el traspaso de aguas a manos privadas en desmedro de las comunidades y el bien común, aprovechando las legislaciones de países como Chile, en que el capital privado ejerce gran presión sin contrapesos.
Freirina: Basta de esta mierda
Nuevamente sin previo aviso, un poco conocido pueblo apareció en las pantallas de todo Chile, haciéndose conocidos por quemar un “guanaco” (carro lanzagua) durante una jornada de protesta. Hartos de respirar el olor a heces fecales de los cerdos confinados en la planta procesadora de Agrosuper, la comunidad de Freirina exigía soluciones. Cartas, solicitudes, declaraciones y varios llamados de atención a las autoridades sobre el descalabro sanitario que se estaba produciendo en su localidad, hasta que decidieron tomar el toro por las astas a pesar de lo políticamente incorrecto que pareciera.
¿Por qué? Pusieron en discusión el discurso que levantan las grandes empresas de ofrecer trabajo a las comunidades, a pesar de los impactos ambientales negativos para ellos. Es decir, amparados en la necesidad de trabajo de las personas, diversas empresas parecieran tener manga ancha para generar daños medioambientales irreparables. El caso del valle del Huasco, donde se ubica Freirina es uno de los más complejos, calificado como “Zona de Sacrificio”, por la densidad de empresas contaminantes en la zona, a saber, el proyecto aurífero Pascua Lama en la cordillera, la planta procesadora de cerdos en Freirina, la planta de pellets de acero de CAP, el complejo termoeléctrico Guacolda que opera cuatro unidades termoeléctricas a carbón, de la cual se autorizó una quinta unidad y, por último, la reciente aprobación de la termoeléctrica Punta Alcalde en Huasco.
Unión Portuaria del Bío Bío: Una fuerza que subyace
Si bien la UPBB no es reconocida masivamente por alguna aparición espectacular, sí son bien conocidos en su rubro. Y es que su rápido crecimiento, agrupando a más de 20 sindicatos de trabajadores portuarios en menos de dos años en la Octava Región es su mayor credencial hoy en día. Se caracteriza por ser una organización sindical de las duras y temidas por los patrones, no por algún rasgo de violencia, sino por la decisión que ponen sus adherentes en cada acción de huelga que desarrollan.
¿Por qué? El rápido crecimiento y lo compacto de la organización, además del rol estratégico que cumplen en la economía del país, los posiciona como un eslabón fundamental en la cadena de producción del país. Si ellos paran y no cargan un buque, las pérdidas pueden superar los millones de dólares y se contabilizan en horas de paralización. Ya están en conversaciones con la mayoría de los puertos del país y acaban de realizar, a principios de enero, un Congreso para avanzar en unificar sus alianzas.
Pescadores artesanales: Cuando una ley es injusta, lo correcto es desobedecer
Los artesanales siempre han sido un hueso duro de roer para todo gobierno y lo demostraron en 2012 y este año con las masivas manifestaciones a nivel nacional, que buscaban frenar la aprobación de la ley larga de pesca, que consideran atentatoria contra su trabajo ancestral. Tras meses de lucha y problemas para mantener la unidad entre las diversas agrupaciones de artesanales, la ley finalmente se aprobó, a pesar del conflicto de interés de muchos parlamentarios que tienen estrechas relaciones comerciales con industriales pesqueros.
¿Por qué? Ya lo anunciaron los que se siguen oponiendo: llamarán a la desobediencia civil. Es decir, no acatarán la aplicación de la ley que les aplica cuotas y áreas de pesca, sobre todo luego de que la ley quedara con el camino despejado para su promulgación. Sin duda, no es un capítulo cerrado y de seguro se tendrán informaciones de algún estallido en los puertos de Chile, patrocinado por los duros pescadores.
Organizaciones Mapuche: De la reivindicación a la propuesta
El conflicto-chileno mapuche sigue sumando capítulos, al igual que miopía y tozudez de los gobiernos y la prensa tradicional. Pareciera que siempre la respuesta más fácil es criminalizar, sin escatimar en recursos, porque es difícil explicar las razones y más aún tomar decisiones políticas que solucionen el conflicto de manera definitiva. Este 2012 fue uno de los más intensos en acciones de recuperación de tierras, así como en actos de protesta de los presos mapuche, que llevaron las huelgas de hambre a niveles insospechados. Al cierre de esta edición, dos presos políticos históricos, Héctor Llaitul y Ramón LLanquileo, concluyeron una huelga de 76 días que llevaron a cabo en la cárcel de Angol.
¿Por qué? Mientras no se tomen medidas de fondo, que requieren análisis en profundidad del conflicto, seguiremos teniendo noticias tristes, tanto para los mapuche que deben soportar allanamientos permanentes a sus comunidades, así como muertes de chilenos. Esta disputa pone en entredicho diversos lugares comunes y supuestos de la sociedad chilena, que es necesario discutir, como la discriminación, el racismo, el poder, la propiedad de la tierra y los rasgos históricos de la formación del Estado chileno. Pero también, para los mapuche que avanzan en la idea de autogobierno y autodeterminación, poniendo en disputa las tesis que plantean sus organizaciones políticas.
Pobladores: Politizar las demandas
Pasar de la condonación de deudas hipotecarias a la apuesta de un partido político para obtener concejalías, es un ejercicio complejo y largo de politización que el movimiento de pobladores ha ido desarrollando. Si bien no todos los movimientos de allegados o comités de vivienda integran el Partido Igualdad, sí han desarrollado una visión politizada de sus demandas, entendiendo que no es sólo el problema del subsidio o de los créditos, sino que el problema de la vivienda es una lucha estructural del sistema económico chileno.
¿Por qué? Son muchos y están dispuestos a dar la pelea. Desde acciones como tirarse al Mapocho, funar actos oficiales, colgarse de estructuras en altura o realizar cortes de ruta, los pobladores están en todo el país y cada vez logran mayores y más complejos niveles de coordinación. Ya lo han demostrado cuando paralizaron por dos horas la capital, cortando el tránsito en arterias medulares de Santiago y si a eso se le añade la maduración política de sus integrantes, serán uno de los actores sociales más preponderantes de los próximos años.
Asamblea Ciudadana de Calama: La torta debe ser mejor repartida
En múltiples ocasiones los calameños han hecho saber su descontento por la forma en que se administran los cuantiosos recursos mineros que salen de la región, y que ellos, según dicen, sólo ven pasar. Agrupados por la figura de su re-electo alcalde Esteban Velásquez, no sólo en Calama, sino que también en las llamadas comunas mineras, se enarbola esta demanda, en vista de la constatación de una realidad comunal y regional que contrasta drásticamente con los recursos e índices de rentabilidad de las mineras.
¿Por qué? Ellos vuelven a plantear la pregunta de cómo se administran los recursos que provienen de la extracción cuprífera, y minera en general, no sólo de Codelco, sino también de las mineras privadas que operan en la región. No basta con los bonos para los trabajadores directos, sino que se deben destinar fondos para aquellas regiones que sean orientados a obras sociales. Han alertado varias veces de esta situación, realizando marchas y cortes que no han tenido tanta rimbombancia mediática, pero que pueden contribuir a incubar más descontento entre la población.
UN OBJETIVO COMÚN
Renacionalizar los recursos naturales: La solución está en nuestras narices
A ojos de muchas organizaciones y analistas, una de las batallas más grandes del mundo social hoy en día, tiene que ver con la administración de la mayor y principal fuente de ingresos para el país, como es el cobre. Pero, no sólo el cobre, han dicho otras organizaciones, sino todos los recursos naturales. A ojos de los sindicatos, la industria debe ser renacionalizada, puesto que los royalties a las mineras extranjeras no son ni suficientes ni los adecuados. La demanda estudiantil de gratuidad se ampara en esta aspiración, enarbolada ya en 2006 por los secundarios, durante la “Revolución Pingüina”.
¿Por qué? Muchos se preguntan “¿por qué no?” y es que con el nivel de dependencia de Chile al mineral rojo, cuesta entender que Chile no sea más enfático en controlar este recurso en su beneficio y con visión estratégica, desarrollando una industria que permita maximizar los ingresos con acento social. Este año se produjeron las primeras alianzas multisectoriales entre sindicatos mineros, trabajadores de la salud, estudiantes, trabajadores bancarios y otros, que coinciden en esta aspiración, a 41 años de que Allende promulgara el decreto de nacionalización.
(Contacto: leoretamal[a]elciudadano.cl)
El Ciudadano Nº139, enero-febrero 2013

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