martes, 21 de junio de 2011

Acusan abandono de la “asociación público-privada” La desilusión de los gremios empresariales con el gobierno de Piñera

Agricultura, los gremios de las ciudades puerto y la Cámara de la Construcción, son tres grandes sectores de la economía que de a poco han ido sacando la voz contra un gobierno que en un comienzo habían sentido como propio. Rechazan los cambios así como las no intervenciones, están desilusionados y algunos aseguran que estaban mejor con la Concertación.


“No volveríamos a apoyar a un gobierno de derecha. Nos sentimos como un consumidor engañado”, aseguran desde la Cámara Nacional de Construcción. La relación con el esperado gobierno de derecha partió mal y hoy anónimamente, fuentes importantes de la Cámara hacen sus alegatos y califican la relación con el gobierno como “pellizcar un vidrio”. Agregando que “el vidrio se puede romper en cualquier momento”.
Del aclamado grupo Tantauco de Vivienda, hoy sólo un integrante está en el gobierno, como aseguran desde la Cámara. El nuevo equipo que lideraba la ex ministra Magdalena Matte, “no generaba confianza en el sector, porque no tenían una capacidad profesional reconocida”. Fue un primer desencuentro, pero lo que verdaderamente les dolió, fue cuando la ministra se reunió por primera vez con ellos: “concedió cinco minutos y en la mitad de la reunión se paró y se fue. Dejó conversando a sus asesores. Fue casi un ninguneo”, asegura una alta fuente del área de la Construcción.
El golpe final del gobierno llegó con el anunció del nuevo reglamento para la postulación a los subsidios, que tardó un año en salir “paralizando la industria por ese tiempo”. Es aquí donde estas fuentes afirman que se está haciendo lo contrario a lo prometido en la campaña presidencial. “Surge la teoría del desacople, donde por un lado entran los productores ofreciendo sus casas y por el otro, los consumidores que eligen libres en una especie de Feria de Lo Valledor, que dirige el Serviu. Se eligió el sistema más burocratizado y se rompe la relación entre la constructora y los consumidores”, explican.
Fuentes de la Cámara de la Construcción, aseguran que este nuevo sistema colapsará los Serviu –porque las personas tienen que ir a postular personalmente junto a su grupo familiar, mayor de 18 años – de esta forma, se repetirá el episodio crítico del año pasado, cuando unas 40 mil personas se instalaron afuera de las oficinas del Serviu, esperando postular a un subsidio habitacional. “La Cámara le advirtió al gobierno que esto va a ser como el Hidroaysén de junio”.
Es que para el área de construcción, “el concepto de alianza público privada este gobierno lo abandonó. La Concertación era menos estatista”. Llama la atención que hoy hay “empresarios de derecha echando de menos a los gobiernos anteriores”. Se mantuvieron callados durante todo este tiempo, porque “es un gobierno de derecha y se han topado con una suerte de lealtad. Pero la paciencia se está acabando y hoy hay presiones fuertísimas a la mesa nacional, para que endurezca cada vez más el discurso”.
Esta fuente asegura que los parlamentarios los están escuchando e incluso que existe una fuerte presión desde la Alianza al gobierno. “Algunos nos dicen que saquemos la voz y digamos lo que pasa de verdad… no se está haciendo nada en reconstrucción y hay personas que podrían pasar un tercer invierno en una mediagua”, asegura.
Un político de derecha explica que los problemas en vivienda subsidiada comenzaron a surgir el año pasado, “cuando las principales empresas reclamaron el atraso de proyectos”. Incluso, asegura que hoy el panorama no es mejor, porque “el Ministerio de Vivienda ha estado paralizado con el caso Kodama y no muestra indicios de cambio con el nuevo ministro”.
Los empresarios se habían mantenido en silencio, pero hace un par de semanas comenzaron a mirar “con especial interés y agrado, lo que están haciendo los agricultores”. Era el empujón que necesitaban para sacar la voz.

El agro rompe el espiral del silencio

La alegría de gran parte del sector empresarial, por el triunfo de la derecha después de 20 años, cada día se disipa más. Las altas expectativas creadas por el discurso de Piñera y su “nueva forma de gobernar”, en algunos casos tocaron fondo. Hace un par de semanas, un sector del agro sacó la voz y marcó un punto de quiebre.
“Las manifestaciones fueron para romper la indiferencia respecto al diálogo con el gobierno”, asegura Antonio Walker, presidente de Fedefruta. Pese a que con el Ministerio de Agricultura han tenido un buen diálogo, “falta comunicación con los ministros políticos, ahí está la indiferencia. Los necesitamos, porque el problema es tan grande que se necesitan cambios profundos”, afirma Walker.
Es probable que las manifestaciones continúen, porque son los pequeños y medianos empresarios los que sienten que este gobierno ya no es suyo, sino que le pertenece sólo a los pesos pesados del mundo privado. “Decepción”, es una palabra que se escucha constantemente en el sector agrícola.
El principal alegato de este sector, es la no intervención por parte del gobierno en el tipo de cambio. Para Eugenio Rivera, director del programa económico de la Fundación Chile 21, “la percepción de los agricultores es que el gobierno no hace nada al respecto y que este no reaccione frente a la política antiinflacionaria del BC, es favorecer a los bancos y a los grandes grupos económicos”.
Pero la relación no es mala con todo el sector agrario. El Presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Luis Mayol, explica que él se ha reunido unas tres veces con el Presidente Piñera y asegura que “hemos integrado diversas comisiones y estado en contacto con distintos ministerios”. Otra fuente de la SNA asegura que “nosotros no tenemos problemas de comunicación con el gobierno, son los gremios más pequeños los que son menos escuchados”.
El escenario se ve complejo, porque desde La Moneda aseguran que “elegimos un tipo de cambio competitivo. No podemos hacer una política cambiaria para las peras y otra para las manzanas”. Y agregan que “no nos podemos preocupar de la rentabilidad de todos en una economía de mercado”.
Es probable que las manifestaciones continúen, porque son los pequeños y medianos empresarios los que sienten que este gobierno ya no es suyo, sino que le pertenece sólo a los pesos pesados del mundo privado. “Decepción”, es una palabra que se escucha constantemente en el sector agrícola.

Ciudades puerto le ponen freno a la Agenda de Impulso Competitivo

Cinco de las 50 medidas de la Agenda de Impulso Competitivo, que lanzó Piñera hace un par de semanas, han encontrado un fuerte rechazo en el sector portuario. La semana pasada salieron a la calle nueve gremios y ya están preparando una movilización nacional “que paralizará a Iquique, Antofagasta, Valparaíso, San Antonio, Talcahuano, Puerto Montt y Punta Arenas”, como asegura una fuente del sector aduana.
Estas cinco medidas aumentarían la concentración económica del país, porque favorece “el centralismo y el monopolio”, como aseguran desde la Coordinadora de Ciudades Puertos, que agrupa a nueve gremios, provenientes del sector aduanero y transportista portuario. “Las medidas se bajan o se bajan. Nosotros tenemos el manojo de llaves de las puertas del país y podemos cerrarlas”, afirma tajante Jorge Bustos, vocero de la Coordinadora.
Estas medidas “significan entregarle a tres o cuatro empresas toda la operación del comercio exterior del país, y eso a la larga, genera colusión y altos costos”, asegura Kenneth Werner, director y ex presidente de la Cámara Aduanera. Además, dejarían a unas “20 mil personas cesantes”, como explican desde la Coordinadora.
La Agenda de Impulso Competitivo marcó un punto de quiebre. Desde La Moneda, aseguran que bajó la tensión que existía en el gobierno con los grandes empresarios, pero al mismo tiempo, aumentó el descontento en los medios y pequeños. Para el sector aduanero fue la gota que rebalsó el vaso: “El gobierno nos tiene en el abandono total, aún no tenemos presidente… nos están dejando morir”, asegura el Presidente de la Cámara Aduanera, Felipe Santibáñez. Agregando que “hay un gran grupo de empresarios muy desilusionados con el gobierno y ya nos aburrimos de esperar”.
Santibáñez asegura que “vamos a presionar para que no salgan las medidas de la Agenda de Impulso Competitivo”. Las conversaciones con parlamentarios de todos los colores ya comenzaron y la semana pasada le pidieron formalmente al senador Francisco Chahuán (RN), que agrupara a los honorables de la zona para alinearlos.

FUENTE: EL MOSTRADOR

No hay comentarios:

Publicar un comentario