Expertos analizan cómo afectarán las Municipales 2012 a los presidenciables
Se suele señalar que la municipal es la previa de la presidencial. Acá los cientistas políticos Guillermo Holzmann y Mauricio Morales explican el panorama de la Alianza y la Concertación y cómo quedarán los presidenciables tras los resultados de octubre.
Jueves 13 de septiembre de 2012| por Carolina Miranda C. - foto: Archivo La Nación
Las elecciones municipales no sólo suponen desafíos para los partidos políticos, sino que también para los presidenciables, pues entrega datos reales sobre el comportamiento electoral de la población, lo que permitirá delinear estrategias para conquistar el voto con miras a La Moneda 2013.
En esta dirección, el analista político Guillermo Holzmann explica que la verdadera pelea de las elecciones presidenciales será vencer “la percepción ciudadana de que el Estado ha prometido desarrollo, cambio y mejores condiciones de vida y eso no se está entregando”.
De ahí que, a su juicio, las municipales servirán para identificar qué quieren los nuevos electores: “La gente quiere que le respondan sus inquietudes, que le definan sus prioridades, que se le responda eficientemente” y desde ahí, definir cursos de acción para “conquistar el centro, ese 10 ó 15% que decide la elección”.
Pero cada presidenciable enfrenta un escenario diferente. En la Concertación hay varios pre candidatos, lo cierto es que los sondeos dan amplia ventaja a la ex Presidenta Michelle Bachelet, que –a pesar de su alto respaldo- no se ha pronunciado sobre regresar a La Moneda.
En la Alianza, el debate está marcado por el momento oportuno para que los ministros presidenciables –Laurence Golborne y Andrés Allamand- dejen el gabinete.
En esta dirección, el director del Instituto de Investigación en Ciencias Sociales de la UDP, Claudio Fuentes, agrega que "lo que pasa a un año y medio de la elección es que aún hay un gran porcentaje indecisos que está esperando que la derecha defina a su candidato para matricularse con ese candidato".
A su juicio, el mejor aliado de la ex Presidenta es el Gobierno, porque “mientras peor le vaya, la gente más la querrá de vuelta”.
Morales asegura que la Directora de ONU Mujeres mantendrá incólume su respaldo ciudadano, lo que sólo variará “cuando ella ingrese de lleno a la campaña presidencial”.
El analista Guillermo Holzmann, en tanto, coincide en que la adhesión ciudadana de Bachelet “se va a mantener con fluctuaciones, pero sobre 60% a todo evento”.
No obstante, precisa que “no me parece que haya una causalidad directa de que toda esa adhesión se transforme en votos”. A su juicio, la fuga de respaldo se podría producir porque Bachelet “administró el país y el modelo bajo la usanza partidaria” que ha sido cuestionada por la ciudadanía.
Fuentes agrega que "el apoyo de Bachelet es bantante impermeable", lo que queda demostrado en que -según la encuesta nacional UDP- "más del 65% de los encuestados cree que cualquier persona habría hecho más o menos lo mismo enfrentada a un terremoto y sólo un 35% cree que debe pedirle perdón al país".
Holzmann define este debate como una muestra de “debilidad institucional”, ya que “no hay primarias ni mecanismos definidos” respecto de cómo se debe operar cuándo un ministro tiene aspiraciones presidenciales.
“Al no haber ese orden, el tema es que quién dice primero, define las cosas”, sentencia.
En este escenario, Golborne “aparece como un outsider dentro del Gobierno”, dice Holzmann, pero agrega que “el ciudadano en Chile no va a votar por los que no están en partido”.
A su juicio, los ministros presidenciables pagarán costos de todas formas, ya que -por una parte- “tienen que frenar el tema de la campaña” y, por otra, si la Alianza baja en el número de alcaldes y concejales, se reduce la base electoral con miras a 2013.
Morales, en tanto, señala que “si Allamand dirigiera la campaña de RN y el partido obtuviese un buen resultado, es evidente que lo impulsaría en su carrera presidencial”.
Asimismo, “si RN logra sobreponerse a la UDI, entonces la cosa puede cambiar, ya que RN puede presionar por primarias y doblegar a la UDI en una elección inédita”.
Respecto de Golborne, el cientista político de la UDP señala que el secretario de Estado “no tiene pito que tocar. Sería una especie de suicidio entrar en la refriega electoral siendo ministro y, peor aún, si decidiera abandonar el gabinete. Se podría exponer a una derrota de su coalición. Sería un acto totalmente innecesario”.
“Él debe esperar con cautela. La derecha tiene un amor empedernido por los independientes y él tiene esa cualidad. No es un político experimentado y en una elección abre los flancos para el ataque”, sentenció.
FUENTE: LA NACION
En esta dirección, el analista político Guillermo Holzmann explica que la verdadera pelea de las elecciones presidenciales será vencer “la percepción ciudadana de que el Estado ha prometido desarrollo, cambio y mejores condiciones de vida y eso no se está entregando”.
De ahí que, a su juicio, las municipales servirán para identificar qué quieren los nuevos electores: “La gente quiere que le respondan sus inquietudes, que le definan sus prioridades, que se le responda eficientemente” y desde ahí, definir cursos de acción para “conquistar el centro, ese 10 ó 15% que decide la elección”.
Pero cada presidenciable enfrenta un escenario diferente. En la Concertación hay varios pre candidatos, lo cierto es que los sondeos dan amplia ventaja a la ex Presidenta Michelle Bachelet, que –a pesar de su alto respaldo- no se ha pronunciado sobre regresar a La Moneda.
En la Alianza, el debate está marcado por el momento oportuno para que los ministros presidenciables –Laurence Golborne y Andrés Allamand- dejen el gabinete.
En esta dirección, el director del Instituto de Investigación en Ciencias Sociales de la UDP, Claudio Fuentes, agrega que "lo que pasa a un año y medio de la elección es que aún hay un gran porcentaje indecisos que está esperando que la derecha defina a su candidato para matricularse con ese candidato".
Bachelet: El esperado retorno
Mauricio Morales, Director del Observatorio Político-Electoral de la UDP, afirma que aunque “todos quieren que vuelva, lo peor que podría hacer Bachelet sería encabezar la campaña de la Concertación”.A su juicio, el mejor aliado de la ex Presidenta es el Gobierno, porque “mientras peor le vaya, la gente más la querrá de vuelta”.
Morales asegura que la Directora de ONU Mujeres mantendrá incólume su respaldo ciudadano, lo que sólo variará “cuando ella ingrese de lleno a la campaña presidencial”.
El analista Guillermo Holzmann, en tanto, coincide en que la adhesión ciudadana de Bachelet “se va a mantener con fluctuaciones, pero sobre 60% a todo evento”.
No obstante, precisa que “no me parece que haya una causalidad directa de que toda esa adhesión se transforme en votos”. A su juicio, la fuga de respaldo se podría producir porque Bachelet “administró el país y el modelo bajo la usanza partidaria” que ha sido cuestionada por la ciudadanía.
Fuentes agrega que "el apoyo de Bachelet es bantante impermeable", lo que queda demostrado en que -según la encuesta nacional UDP- "más del 65% de los encuestados cree que cualquier persona habría hecho más o menos lo mismo enfrentada a un terremoto y sólo un 35% cree que debe pedirle perdón al país".
El debate dentro o fuera
En la Coalición, en tanto, el debate presidencial tiene 2 ejes: cuándo deben abandonar el gabinete los ministros de OOPP, Laurence Golborne, y de Defensa, Andrés Allamand, y cómo se definirá al abanderado.Holzmann define este debate como una muestra de “debilidad institucional”, ya que “no hay primarias ni mecanismos definidos” respecto de cómo se debe operar cuándo un ministro tiene aspiraciones presidenciales.
“Al no haber ese orden, el tema es que quién dice primero, define las cosas”, sentencia.
En este escenario, Golborne “aparece como un outsider dentro del Gobierno”, dice Holzmann, pero agrega que “el ciudadano en Chile no va a votar por los que no están en partido”.
A su juicio, los ministros presidenciables pagarán costos de todas formas, ya que -por una parte- “tienen que frenar el tema de la campaña” y, por otra, si la Alianza baja en el número de alcaldes y concejales, se reduce la base electoral con miras a 2013.
Morales, en tanto, señala que “si Allamand dirigiera la campaña de RN y el partido obtuviese un buen resultado, es evidente que lo impulsaría en su carrera presidencial”.
Asimismo, “si RN logra sobreponerse a la UDI, entonces la cosa puede cambiar, ya que RN puede presionar por primarias y doblegar a la UDI en una elección inédita”.
Respecto de Golborne, el cientista político de la UDP señala que el secretario de Estado “no tiene pito que tocar. Sería una especie de suicidio entrar en la refriega electoral siendo ministro y, peor aún, si decidiera abandonar el gabinete. Se podría exponer a una derrota de su coalición. Sería un acto totalmente innecesario”.
“Él debe esperar con cautela. La derecha tiene un amor empedernido por los independientes y él tiene esa cualidad. No es un político experimentado y en una elección abre los flancos para el ataque”, sentenció.
FUENTE: LA NACION
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