Diputado RN critica que ex ministros hagan noticia por defender intereses particulares
N. Monckeberg duro con Longueira, Chadwick, Pérez M. y Golborne: “No me gusta ver a ex ministros abrir las puertas a las empresas de lobby”
El ex presidente de la Cámara de Diputados cuestiona a los ex secretarios de Estado del gobierno de Piñera, porque ambos junto a Luis Hermosilla lograron firmar la semana pasada un acuerdo entre su empresa LCH&H con Enrique Correa, el dueño de Imaginacción, única empresa que siempre ha reconocido hacer lobby en el país y que también presta asesoría comunicacional.
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El ex presidente de la Cámara de Diputados, Nicolás Monckeberg, criticó duramente a quienes fueron secretarios de Estados del gobierno de Sebastián Piñera por defender actualmente intereses particulares y no las ideas del sector, añadiendo que “no me gusta ver a ex ministros abrir las puertas a las empresas de lobby“.
El diputado RN cuestionó fuertemente la actitud que han tenido Pablo Longueira, Andrés Chadwick, Rodrigo Pérez Mackenna y Laurence Golborne porque “lamentablemente han hecho noticias no porque defienden nuestros valores políticos, sino porque han optado por defender intereses particulares”.
Así lo expresa en una entrevista a La Tercera, en la que añade que “hay una diferencia entre el legítimo derecho de ganarse la vida después de ejercer un cargo y transformarse, en tiempo récord, en el defensor de grupos de interés”.
La posición crítica de Monckeberg se debe a que Longueira y Chadwick, junto a Luis Hermosilla, lograron firmar la semana pasada un acuerdo con Enrique Correa, el dueño de Imaginacción, única empresa que siempre ha reconocido hacer lobby en el país y que también presta asesoría comunicacional.
El acuerdo conseguido por los ex ministros se debe a que la consultora formada LCH&H (Longueira, Chadwick y Hermosilla) no ha conseguido generar clientes que puedan ser asesorados, ya que –como señala El Mostrador en su edición del pasado 17 de junio– se debe a que los empresarios los identifican como ex funcionarios del gobierno de Piñera y temen que estar asociados a sus nombres pueda caer mal en la actual administración Bachelet.
En ese sentido, Monckeberg señala que tales rostros estén en labores de lobby “daña la credibilidad de nuestro sector”, afirmando que le llama la atención la indiferencia de algunos ex parlamentarios de la derecha o ex ministros , ya que “es necesario que sean parte del debate y defiendan con fuerza nuestras ideas”.
“Algunos ex ministros eligieron el peor momento para desaparecer del debate público, como si todo lo que hubiesen hecho valió para llevarlos de vuelta al sector privado. La política y el servicio público no pueden ser vistos como una pasantía breve, que únicamente sirve para engrosar el currículum o para contarles la experiencia a los nietos. No es un momento cualquiera, estamos frente al debate más profundo sobre el modelo de sociedad, se está poniendo en jaque la libertad y Chile se está jugando su opción de desarrollo”, precisa.
A renglón seguido expresa que “la confianza de las personas se pierde mucho más rápido. Voy a ser franco, no se ve bien que un ex ministro que transpiró con una brillante gestión para darles una solución habitacional a personas de escasos recursos, en cosa de semanas se le reconozca por ser el defensor de un grupo de interés legítimo como las AFP. No me gusta ver a ex ministros o ex parlamentarios cerrar la puerta al servicio público en el momento en el que se debaten las grandes transformaciones de Chile y abrir las puertas a las empresas de lobby“.
Monckeberg menciona que la idea planteada por el gobierno de preparar una reforma que restringa que ex autoridades que fiscalizaban se vayan al mundo privado en el mismo rubro en el que controlaban es distinta a lo que expresa, ya que “más que el eventual conflicto de interés, es la falta de interés que han demostrado importantes personas del gobierno anterior al salirse del debate político”.
Nueva directiva y nuevos principios de RN
El diputado de derecha también dice no compartir la idea del ex timonel de la tienda, Carlos Larraín, de mantener en la declaración de principios la alusión al Golpe Militar, ya que “no deben anclarse en momentos históricos, más aún cuando se trata de momentos con visiones contrastantes”.
Y añade que “llegó la hora de tener una centroderecha distinta, más abierta, que sea capaz de identificar a un amplio sector de centro, que defienda la libertad y los derechos humanos. Chile no necesita a una centroderecha atrincherada y presa de un falso dogmatismo. Nuestro adversario es el populismo”.
En ese sentido, Monckeberg sostiene que para que la centroderecha logre la mayoría que les permita regresar al gobierno es necesaria una nueva alianza e identificar a mucha gente con esta, por lo que el “mayor desafío de RN y la UDI es ir juntos e iniciar este camino de apertura. Pero eso no se puede hacer con amarres ni con posiciones dogmáticas, como a veces se ve en sectores de la derecha”.
FUENTE: EL MOSTRADOR
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