Frente Amplio Unitario

¿Quién tiene la culpa ante la “asumida” derrota de Matthei? Se repartirá entre RN, la UDI y Piñera dependiendo de la magnitud del resultado

17/10/2013 |

Por Equipo Cambio21

En la Alianza la situación es clara: una cosa es perder en primera vuelta y con doblajes en varios distritos y circunscripciones para la oposición y otra es caer en segunda vuelta, con una competencia digna de Evelyn Matthei y una cantidad de doblajes menor o que no haya doblajes en los lugares importantes. Catastrófico sería si surgiera un tercero que le quitara ese espacio.

Ni siquiera comenzaba la recta final de la campaña presidencial, esto es el último mes antes de la elección, cuando en RN comenzó a ventilarse el primer síntoma de un duro mea culpa que se generará en el sector una vez que se concrete la derrota de la abanderada Evelyn Matthei, sea ésta en primera o segunda vuelta.

 

El primero en aventurarse en la búsqueda de responsabilidades fue el timonel de la citada colectividad, Carlos Larraín, quien señaló que si la ex ministra pierde ante la candidata de la Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, "sería un fracaso estrepitoso, sobre todo del gobierno que es el que lleva el pandero".

 

En respuesta a tales dichos, los diputados "liberales" de la entidad de Antonio Varas 454, Pedro Browne y Joaquín Godoy, negaron lo anterior y le asignaron la culpa a los partidos políticos.

 

Según el primero, "no hay que olvidar que son los partidos políticos los que nominan las candidaturas y nosotros mismos como RN hemos dicho muchas veces que el gobierno no debe intervenir en esto".

 

A su juicio, acusar al gobierno es "una muy mala idea que ha instalado Patricio Melero (jefe UDI) y ahora Carlos Larraín esto de empezar a asignar responsabilidades antes de una derrota".

 

"La que continúa -después de marzo de 2014- es la Alianza y los partidos que la componen, así que decir que el gobierno va a ser el perdedor no tiene ningún sentido", agregó.

 

Godoy, en tanto, recordó que la personalización de la derrota en Piñera y su gestión fue iniciada por el ex candidato a La Moneda, Andrés Allamand, cuando "dijo que al presidente se le iba a evaluar dependiendo de si se elegía o no a la abanderada del sector", lo cual "me parece una forma bastante pequeña de hacer política".

 

"El gobierno lo ha hecho bien y la gente lo va a reconocer. No siento que perder sería una derrota estrepitosa o que el gran culpable sería el gobierno, porque lamentablemente los que no han estado a la altura de Sebastián Piñera han sido los partidos", insistió.

 

Para peor, en este denso clima interno renunció a RN uno de los emblemas de la disidencia a la directiva de Larraín, Daniel Platovsky, amigo personal de Piñera y en su momento líder liberal que intentó formar un referente para relevar al senador de la testera de la agrupación.

 

Antes de partir, el empresario advirtió que la facción "piñerista" que existe al interior de RN podría terminar formando un referente distinto y fuera de la colectividad, primer paso de una "nueva derecha" que aspira a separarse de la derecha dura que rechazó las críticas de Piñera hacia los "cómplices pasivos" del golpe militar y el posterior cierre del penal Cordillera.

 

Mario Desbordes, secretario general de RN, desdramatizó el hecho tras afirmar que "la entrada es voluntaria y la salida también es voluntaria. La verdad es que nunca hubo algo realmente constituido como disidencia. Fueron algunos chispazos que a estas alturas no tienen mucho sentido".

 

"El próximo año hay elección interna y todo aquel que no esté de acuerdo con la directiva tiene todo el derecho del mundo a hacer una campaña y a trabajar para ganar la conducción del partido. Así se dirimen en RN", notificó el actual candidato a diputado por La Cisterna.

 

Dignidad

 

Para Patricio Gajardo, politólogo de la Universidad Católica, el mea culpa de la derecha, sea éste del gobierno o los partidos, estará marcado por la magnitud de la derrota electoral que registre Matthei en el proceso del 17 noviembre o, en el mejor de los casos, en el balotaje de mediados de diciembre.

 

En diálogo con Cambio21, el analista indicó que "una cosa es perder en primera vuelta y con doblajes en varios distritos y circunscripciones para la oposición y otra es caer en segunda vuelta, con una competencia digna de Evelyn Matthei y una cantidad de doblajes menor o que no haya doblajes en los lugares importantes. Catastrófico sería si surgiera un tercero que le quitara ese espacio".

 

"Si hay algo positivo de todo esto -añade-, es que lo que se viene es algo anunciado, internalizado y asumido. Por lo tanto, hay un nivel de expectativa relativamente realista. Si pasara Parisi o Enríquez-O sería algo poco realista, pero tendría un gran impacto".

 

El investigador anticipa que lo que se dará "sí o sí" es una "refundación de la derecha", lo que pasará "al margen de la elección presidencial. "Piñera ha jugado un rol muy gravitante y para que Matthei tuviera también un papel destacado debería tener un resultado honroso. De lo contrario, Piñera también sería perjudicado, porque se le pasaría la cuenta".

 

En su opinión, "sería muy difícil pasarle la cuenta a Piñera si Matthei tiene un resultado digno. Si pasa lo contrario, es decir una debacle, y con el proceso de refundación de la derecha en marcha, costaría mucho más desligarse de la responsabilidad".

 

Para terminar, Gajardo también cree que RN y la UDI tienen su cuota de culpa, "básicamente, porque no fueron pragmáticos. Los partidos, cuando se discutía la situación de Matthei (tras la bajada de Longueira) tuvieron que haberse alineado al margen de las disputas internas. Eso no se hizo y deberá analizarse después de la elección".

 

"El problema es que Piñera con el gobierno se necesitan y eso tarde o temprano se tendrá que resolver. ¿Cómo? Dependiendo del resultado y de la capacidad de liderazgo que tenga el mandatario durante la campaña", concluyó.

 

FUENTE: CAMBIO 21