Ruiz-Esquide: “Chile es más desigual que en 1963, cuando ingresé a la política”
El senador DC Mariano Ruiz-Esquide anunció la semana pasada que no se repostulará al Congreso. Termina así una extensa carrera política en la que ha sido protagonista durante medio siglo. En esta entrevista con Nación.cl, hace un balance de su actividad como legislador y habla de cuando junto con otros 12 DC se opuso al Golpe de Estado de 1973.
Lunes 18 de marzo de 2013| por
Lautaro Muñoz
- foto: UPI (Archivo)
-¿Qué balance hace de su actividad parlamentaria ahora que la abandona?
-Tengo la sensación de haber hecho lo imposible por lograr todas las ideas y concretarlas en proyectos de leyes. Logramos la concreción de algunos temas en leyes, reglamentos, políticas y acciones concretas. Pero también tengo muy claro que no todo lo que quise hacer en estos años lo logré. Hay materias en las que no logramos avanzar. Me hace mucha tristeza como dicen los españoles, el saber que muchas cosas que quise concertar no las logramos.
"Por ejemplo quisiera haber ayudado más a que hubiéramos disminuido más las desigualdades en Chile. El país tiene una desigualdad mayor que la que teníamos en 1963 cuando ingresé a la política en Talcahuano. No es que haya más pobreza, hay menos pobreza, pero la riqueza dura del país, de las grandes fortunas, y las grandes desigualdades han aumentado. Eso es negativo para el desarrollo humano del país. Hubiera querido resolver ya el tema de las isapres y los temas de la educación, como lo que ha pasado con los muchachos de la Universidad del Mar, especialmente las carreras de la salud, y muchas otras cosas".
"Sí hemos logrado hacer realidad el posnatal, se mejoró la situación de los jubilados, hay muchas cosas que hemos hecho. Mi balance es que no logré todo, pero sí algunas cosas muy importantes".
-¿Cree que un nuevo Gobierno de la Concertación se podrá hacer cargo de los temas pendientes?
-Espero que sí en la medida en que la gente comprenda 2 cosas: Cuando algunos dicen que la Concertación y la derecha es lo mismo están equivocados. Lo dice alguna gente que dice ser de extrema izquierda, pero son generalmente testimonios que no tiene mucha validez, porque no hay mucha correspondencia con el modo de vida. En segundo lugar, se debe comprender que, para avanzar en democracia, se requiere un Congreso que tenga las mayorías para plantear las leyes. Ningún Gobierno de la Concertación tuvo las mayorías necesarias en la Cámara y el Senado. Espero que no sólo se vote por la o el Presidente de la Concertación, sino que se le dé la mayoría en ambas cámaras, que es la única manera de avanzar con leyes.
-Pero no se ve una Concertación monolítica en torno a los cambios. En las votaciones, hay parlamentarios que votan contra el bloque.
-Lo que pasa es que no somos ángeles, somos seres humanos. Lo importante hoy es que tengamos un programa. Estamos discutiendo permanentemente sobre las personas. He dicho hasta el cansancio, que lo primero que debe hacer la DC y la oposición en su conjunto es tener un programa claro. Y ese programa debe ser aceptado por todos los que postulen a las primarias. Con esa anuencia se puede presentar al país un proyecto político que garantice mayoría para la Presidencia, para senadores y diputados.
-Se dice que su reemplazo en la circunscripción será Hossaín Sabag. En muchos temas, él tiene una opinión distinta a la suya. ¿Está de acuerdo con esa decisión?
-He tenido por norma en los 57 años de militancia no referirme a las conductas de los demás DC. Si se hace una comparación, será el partido y la ciudadanía los que deban juzgar.
-Fue un momento difícil. Cada vez que pienso en eso me tiritan las piernas. Estábamos entre la libertad y el miedo. Los 13 que firmamos llegamos a la conclusión que era imprescindible condenar el golpe.
"No había más de 10 ó 15 militantes que hubieran querido el golpe per se. El problema que se produjo es que tal como se estaban dando las cosas, la DC llegó a la conclusión que lo peor era que continuara la Unidad Popular. Se creyó que los militares podían asumir por un tiempo, que era lo que se suponía, creían que iban a tener un corto período mientras arreglaban la hacienda pública como lo había hecho Aramburu en Argentina. Nosotros no creíamos eso. Hubo una equivocación en el pronóstico, nosotros dijimos: golpe militar jamás, venga de donde venga. Además pensábamos que se iban a quedar al estilo franquista 15 ó 20 años.
"La directiva del partido en cambio creía que estábamos en presencia de la posibilidad de un golpe militar marxista que podía durar 30 años, creían que conocían a los militares de Chile y que iban a estar sólo un tiempo. Yo siempre he defendido que Frei y Aylwin no fueron golpistas, pero se equivocaron en el pronóstico".
-Eso es una falacia, todos somos demócrata cristianos. Mientras no haya una definición por la Concertación, respaldamos al candidato triunfante en la lucha interna que es Claudio Orrego. Distinto es cuando él eventualmente gane, entonces lo vamos a respaldar y si pierde lo haremos con Bachelet, que parece ser la persona que tiene más opciones en la Concertación. No hay contradicción alguna entre apoyar a Orrego o apoyar a Bachelet.
"Distinto es lo que ha hecho la lista de mi camarada Ignacio Walker y lo que ha hecho Claudio Orrego al insistir en que su jefe de campaña fuera en la lista de Walker. Mi pregunta es si no le interesa ni la votación ni la opinión de los que hemos estado con Aldo Cornejo. Si mi opinión no le interesa para nada, porque tampoco hemos sido convocados para estos efectos, ¿yo tengo obligaciones con él?".
-¿Con Orrego?
-Sí, yo digo lo que pienso. Me pareció que fue un error monumental de Walker y de Orrego y lo digo públicamente, porque se lo he dicho a Ignacio Walker. Cuando uno se lo dice al presidente del partido que fue un error, estoy en libertad de conciencia de decirlo a los medios.
Además es un agravio muy serio que nos hace a quienes llevamos tantos años en el partido. Se nos dice, da lo mismo lo que usted haga yo voy en la lista de Walker.
FUENTE: LA NACION
-Tengo la sensación de haber hecho lo imposible por lograr todas las ideas y concretarlas en proyectos de leyes. Logramos la concreción de algunos temas en leyes, reglamentos, políticas y acciones concretas. Pero también tengo muy claro que no todo lo que quise hacer en estos años lo logré. Hay materias en las que no logramos avanzar. Me hace mucha tristeza como dicen los españoles, el saber que muchas cosas que quise concertar no las logramos.
"Por ejemplo quisiera haber ayudado más a que hubiéramos disminuido más las desigualdades en Chile. El país tiene una desigualdad mayor que la que teníamos en 1963 cuando ingresé a la política en Talcahuano. No es que haya más pobreza, hay menos pobreza, pero la riqueza dura del país, de las grandes fortunas, y las grandes desigualdades han aumentado. Eso es negativo para el desarrollo humano del país. Hubiera querido resolver ya el tema de las isapres y los temas de la educación, como lo que ha pasado con los muchachos de la Universidad del Mar, especialmente las carreras de la salud, y muchas otras cosas".
"Sí hemos logrado hacer realidad el posnatal, se mejoró la situación de los jubilados, hay muchas cosas que hemos hecho. Mi balance es que no logré todo, pero sí algunas cosas muy importantes".
-¿Cree que un nuevo Gobierno de la Concertación se podrá hacer cargo de los temas pendientes?
-Espero que sí en la medida en que la gente comprenda 2 cosas: Cuando algunos dicen que la Concertación y la derecha es lo mismo están equivocados. Lo dice alguna gente que dice ser de extrema izquierda, pero son generalmente testimonios que no tiene mucha validez, porque no hay mucha correspondencia con el modo de vida. En segundo lugar, se debe comprender que, para avanzar en democracia, se requiere un Congreso que tenga las mayorías para plantear las leyes. Ningún Gobierno de la Concertación tuvo las mayorías necesarias en la Cámara y el Senado. Espero que no sólo se vote por la o el Presidente de la Concertación, sino que se le dé la mayoría en ambas cámaras, que es la única manera de avanzar con leyes.
-Pero no se ve una Concertación monolítica en torno a los cambios. En las votaciones, hay parlamentarios que votan contra el bloque.
-Lo que pasa es que no somos ángeles, somos seres humanos. Lo importante hoy es que tengamos un programa. Estamos discutiendo permanentemente sobre las personas. He dicho hasta el cansancio, que lo primero que debe hacer la DC y la oposición en su conjunto es tener un programa claro. Y ese programa debe ser aceptado por todos los que postulen a las primarias. Con esa anuencia se puede presentar al país un proyecto político que garantice mayoría para la Presidencia, para senadores y diputados.
-Se dice que su reemplazo en la circunscripción será Hossaín Sabag. En muchos temas, él tiene una opinión distinta a la suya. ¿Está de acuerdo con esa decisión?
-He tenido por norma en los 57 años de militancia no referirme a las conductas de los demás DC. Si se hace una comparación, será el partido y la ciudadanía los que deban juzgar.
LA DC Y EL GOLPE
-Inmediatamente ocurrido el golpe de Estado de 1973, usted fue uno de los 13 DC que firmaron la carta rechazando la intervención militar. ¿Cómo recuerda ese momento? ¿La DC se equivocó en no tener la misma reacción de ustedes?-Fue un momento difícil. Cada vez que pienso en eso me tiritan las piernas. Estábamos entre la libertad y el miedo. Los 13 que firmamos llegamos a la conclusión que era imprescindible condenar el golpe.
"No había más de 10 ó 15 militantes que hubieran querido el golpe per se. El problema que se produjo es que tal como se estaban dando las cosas, la DC llegó a la conclusión que lo peor era que continuara la Unidad Popular. Se creyó que los militares podían asumir por un tiempo, que era lo que se suponía, creían que iban a tener un corto período mientras arreglaban la hacienda pública como lo había hecho Aramburu en Argentina. Nosotros no creíamos eso. Hubo una equivocación en el pronóstico, nosotros dijimos: golpe militar jamás, venga de donde venga. Además pensábamos que se iban a quedar al estilo franquista 15 ó 20 años.
"La directiva del partido en cambio creía que estábamos en presencia de la posibilidad de un golpe militar marxista que podía durar 30 años, creían que conocían a los militares de Chile y que iban a estar sólo un tiempo. Yo siempre he defendido que Frei y Aylwin no fueron golpistas, pero se equivocaron en el pronóstico".
EL ERROR DE WALKER Y ORREGO
-¿Usted es bacheletista u orreguista?-Eso es una falacia, todos somos demócrata cristianos. Mientras no haya una definición por la Concertación, respaldamos al candidato triunfante en la lucha interna que es Claudio Orrego. Distinto es cuando él eventualmente gane, entonces lo vamos a respaldar y si pierde lo haremos con Bachelet, que parece ser la persona que tiene más opciones en la Concertación. No hay contradicción alguna entre apoyar a Orrego o apoyar a Bachelet.
"Distinto es lo que ha hecho la lista de mi camarada Ignacio Walker y lo que ha hecho Claudio Orrego al insistir en que su jefe de campaña fuera en la lista de Walker. Mi pregunta es si no le interesa ni la votación ni la opinión de los que hemos estado con Aldo Cornejo. Si mi opinión no le interesa para nada, porque tampoco hemos sido convocados para estos efectos, ¿yo tengo obligaciones con él?".
-¿Con Orrego?
-Sí, yo digo lo que pienso. Me pareció que fue un error monumental de Walker y de Orrego y lo digo públicamente, porque se lo he dicho a Ignacio Walker. Cuando uno se lo dice al presidente del partido que fue un error, estoy en libertad de conciencia de decirlo a los medios.
Además es un agravio muy serio que nos hace a quienes llevamos tantos años en el partido. Se nos dice, da lo mismo lo que usted haga yo voy en la lista de Walker.
FUENTE: LA NACION
No hay comentarios:
Publicar un comentario