lunes, 18 de marzo de 2013

¿Piñera suplirá la falta de líderes de la derecha a partir de 2014? Sociólogo instala la duda razonable: “Será senador y luego candidato en dos períodos más”

Por Luis Casanova R.
En conversación con Cambio21, el analista de la Universidad Central, Emilio Torres, anticipó que si Piñera sale del gobierno con una adhesión inferior al 40%, “le quedará la opción de continuar como lo hizo Lagos o Bachelet, que se fueron por las fundaciones y establecieron referentes ideológicos, que creo que es lo que necesita reforzar la Alianza”.
Si uno se guiara por la entrevista que el presidente Sebastián Piñera le concedió recientemente a la revista Capital, estaría todo claro: No repostulará el 2017, no volverá a los negocios, no hay ningún "tapado" en la derecha que reemplace a Golborne o Allamand si no suben en las encuestas y se abocará exclusivamente al mundo académico y a potenciar a las fundaciones Futuro, Tantauco y Mujer Emprende.

Pero no. En política todo puede pasar y ante el vacío de liderazgos que se vislumbra en la derecha después que entregue la banda tricolor, en marzo de 2014, los escenarios que se palpitan son diversos y los nombres que emergen en el horizonte también.

Están Laurence Golborne y Andrés Allamand, uno de los cuales se erigirá después del 30 de junio como el líder de la Alianza aún si pierde ante la oposición el 17 de noviembre próximo.

Luego viene Pablo Longueira, ministro de Economía y referente de la UDI, que plantea suspender las primarias y que sus ex colegas de Obras Públicas y Defensa lleguen juntos a la primera vuelta. Se elucubra internamente que esta idea busca impedir que Golborne o Allamand sean ungidos como los cabecillas de la derecha y así mantener el vacío que impera hasta la fecha.

También está Manuel José Ossandón, directivo de RN y candidato a senador por Santiago Oriente, un fiero crítico del gobierno y de la Concertación y una figura en alza en el oficialismo.

Por si acaso, en el terreno femenino emergen la senadora de RN Lily Pérez y las ministra del Trabajo y Sernam, Evelyn Matthei, de la UDI, y Carolina Schmidt, respectivamente.

¿Senador?

Diversos análisis entregan como conclusión que el verdadero trabajo que está efectuando el presidente -a nivel de anuncios y de protagonismo en materia de Relaciones Exteriores- no busca potenciar electoralmente a sus ex ministros en campaña.

A la inversa, su meta es salir del gobierno con una aprobación que supere el 40%, que es el piso histórico de la Alianza, y de esta forma preparar su retorno a las grandes ligas.

"Todo depende de cómo sea este año para él y de cómo termine su gestión", explicó a Cambio21 el sociólogo de la Universidad Central, Emilio Torres. "Ahora, obviando las cifras y mirando lo que ha sido la trayectoria de los ex presidentes, un indicador podría ser imitar lo que hizo Frei. Es decir, seguir como senador y mantenerse activo políticamente a la expectativa de poder acceder a un eventual nuevo período, mal que mal aún sigue siendo un político relativamente joven a sus 63 años", destacó.

"Sería extraño y difícil de imaginar que retorne a los negocios y sólo ejerza un rol de empresario. Ya tuvo esta alma dividida antes cuando era accionista y senador en los 90 y su estatus de presidente, si bien se ha ido desgastando en Chile y en todo el mundo, de todas maneras pesa mucho como para poder transformarse en un civil cualquiera y vivir normalmente. Todo mandatario intenta mantener un legado histórico y una imagen de trascendencia", añade.

La cosa es sencilla para Torres: "Si termina de forma ascendente y recupera protagonismo, como lo tuvo al inicio de 2010, uno podría imaginarse que se puede mantener el talante pensando en otra candidatura, pero en un par de períodos más. De lo contrario, le queda continuar como lo hizo Lagos o Bachelet, que se fueron por las fundaciones y establecieron referentes ideológicos, que creo que es lo que necesita reforzar la Alianza, aunque no es su fuerte en estos momentos".

¿Qué ocurrirá si sigue bajando en los sondeos? "Se vendría una reclusión más tranquila y retirada, pero igual lejos de los negocios, lo descartaría. No obstante, la variabilidad de la contingencia lo tiene subiendo un poco, los bonos que anunció podrían traer un efecto en algún sentido reposicionador", contesta.

Para finalizar, si Piñera entrega el mando con el 20% de adhesión, el académico es enfático: "Sería una salida parecidas a las situaciones peruanas y de difícil repunte, pero con una vida civil igual de completa. Y no sería fácil manejar eso con la edad y energía que demuestra".

FUENTE: CAMBIO 21

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