Frente Amplio Unitario

Alcalde De la Maza asegura que la derecha no tiene qué proponer a Chile

29/11/2014 |

Por Mario López Moya

Francisco De la Maza, el alcalde rebelde de Las Condes y díscolo militante UDI, confiesa que la derecha no tiene una propuesta que hacer a Chile. Confiesa además que los casos Wagner y Penta los tienen complicados, sobre todo el primero al que no le encuentra justificación y afirma además que le hubiera gustado borrar de la declaración de principios gremialista las referencias al 11 de septiembre.

Como siempre, De la Maza cuando habla, no deja indiferente a nadie, sea que se comparta o no su análisis, reflexión o propuesta. Ellas generalmente rompen los esquemas de la derecha estricta, a pesar de provenir del militante de uno de los más recalcitrantes partidos conservadores de la historia del país.

Rebelde por autodefinición

El alcalde de la UDI lamenta la falta de contenido en el discurso de su sector y en la ausencia de cosas concretas, ideas, proyectos que proponer al país. También hace un llamado a comenzar a trabajar desde ahora en un programa de gobierno para la próxima elección presidencial, a pesar de faltar más de tres años para ello.

Aunque dado su carácter rebelde y aparecer muchas veces muy fuera de la línea oficial de su partido, reconoce que le costaría abandonar la UDI porque "La militancia es difícil abandonarla, suena un poco a traición. Salvo que haya una cosa muy de fondo: si a uno no le dejaran expresar lo que piensa...", respondió en una entrevista concedida al vespertino La Segunda.

Aunque está por legalizar las relaciones fuera del matrimonio, es claro que no las equipara al matrimonio heterosexual. "Soy partidario de la regulación de parejas en términos legales de forma libre. Sí creo que hay una diferencia entre una pareja, un hombre y una mujer, que se juntan a procrear, y una pareja que se junta con fines legítimamente distintos como pasarlo bien, tener compañía, dejarse herencia", señala.

Sí a la adopción por parejas gay

Si bien no se expresa a favor del matrimonio entre parejas homosexuales, sí acepta que estas puedan adoptar: "Sí, creo que el tema de la paternidad tiene que ver más con los aspectos sicológicos que con su comportamiento sexual. Es más peligroso que sean padres personas con cierto grado de desequilibrio, que puedan conducir a un hijo de forma equivocada.

Desestimó que por el solo hecho de ser adoptado un niño por una pareja gay, no se asegura que vaya a resultar "torcida" su formación. "Exactamente. Eso no lo creo. En términos de regulación, ya sea AVP o como quieran llamarlo, es necesario. Estamos muy atrasados en ese sentido", afirmó.

PentaUDI y el caso Wagner

Lo que sí le complica es el actual momento que golpea a la UDI, que ha resultado fuertemente vapuleada por los casos Penta de fraude fiscal que afecta a una media docena de sus parlamentarios o altos dirigentes, del exalcalde Cristián Labbé procesado por delitos de lesa humanidad y el de la senadora Jacqueline van Rysselberghe, querellada por el CDE que le imputa desviar dineros de la Municipalidad de Concepción en favor de su hermano candidato a diputado por su mismo partido.

"Obviamente ha sido un golpe duro. Ahora, me parece que en esto no debe haber doble estándar en la política. La ley actual tiene 10 años de un marco mínimo de regulación, pero hoy, más allá del caso Penta, tenemos que aprovechar de mejorar esa legislación (...) No tengo dudas que un porcentaje altísimo de las campañas en Chile deben estar contaminadas con sistema iguales a los que hemos visto hoy que se filtran en la prensa. No tengo ninguna duda.

Claro que encuentra "matices" entre ese caso y el del ex subsecretario de Piñera, Pablo Wagner: "Hay una diferencia fundamental entre que un esquema electoral tenga una mala forma de financiarse, con el caso de Wagner, que es mucho más confuso. Que él reciba una indemnización, pago de una deuda, o lo que sea a través de otra persona, me parece que tiene menos presentación. Entiendo que tenga derecho a defensa, pero para mí es mucho menos presentable que los otros casos", señala sobre el tema.

Cambiarlo todo para no cambiar nada

Aunque era partidario de eliminar las referencias y alabanzas al golpe del 11 de septiembre en los estatutos de la UDI, acepta a regañadientes que ello no haya sucedido: "Debatir es sano. Pero me interesa más el debate del futuro. Del pasado me importa no repetir los errores. -Hay temas de sensibilidad que respeto. En la UDI hay personas que fueron activos participantes del gobierno militar, y hay otros que no lo fuimos, y otros que nacieron en democracia. Para ellos eso es historia. Muchos más importante que cambiar un papel es que reconozcamos errores del pasado. Por mí lo borraría hace rato, pero cuando uno tiene una colectividad tiene que buscar una mirada más amplia", se conforma.

También reconoce que la UDI se ha quedado solo en denunciar la problemática y que adolece de propuestas y soluciones. "El zapato chino de verdad es cómo generar una propuesta ideológica adecuada, que el país sintonice con ella y que vaya en una mirada que resuelva los problemas. Hoy todos tenemos un diagnóstico común, el punto es cómo uno resuelve el problema. ¿Por qué hay diferencias? Porque no hay una respuesta a la cual uno pueda decir: ésta es la solución".

Estima el alcalde De la Maza que esa es una tarea pendiente, que no se arregla con videos de rebeldía: "No sólo (de) la UDI, y ese es el desafío de los partidos en los próximos años. Tenemos que hacer la nuestra de todas maneras, y ojalá sea la mejor. Son dos cosas distintas. Una es proponerle a Chile un modelo de desarrollo con correcciones de lo que no se ha podido resolver. Distinto es que un partido de oposición pueda objetar las cosas que se están haciendo mal, cosa que es necesario. Lo que pasa es que eso, sin una oferta política, es muy débil".

No es cuestión de "rebelarse" en videos

Asegura que no se trata de rebelión por rebelión "El problema es que el ámbito político se centra en una discusión que no está a la altura de lo que quiere la gente (...) Hoy no hay un país a quien copiar el modelo. Porque efectivamente hay faltas de respuesta de los modelos que hemos tenido. Hay casos aislados, como Finlandia en la educación, pero un modelo político, no existe. La UDI y la centroderecha no tienen una propuesta que hacer a Chile.

La única manera es a través de construir un programa de gobierno desde ya, pensando en la próxima presidencial, y que ese programa vaya generando opciones de solución respecto de las demandas que hay. Esto hay que empezar a hacerlo desde ya. Tenemos que construir un programa y después vemos quién lo encabeza, que es, básicamente, el que pueda ganar.

FUENTE: CAMBIO 21