viernes, 11 de abril de 2014

La mala salud que dejó Piñera: hospitales concesionados están inconclusos, no atienden y deben millones al Estado

11/04/2014 |
Por Felipe Reyes
Cada vez aparecen más obras atadas que dejó el gobierno de Sebastián Piñera. Cuestiones que no siempre son muy gratas de escuchar, pues varias están en el límite de lo legal o que lo infringen burdamente.
De un tiempo a esta parte se ha buscado avanzar en el servicio público, un tema no menor para el país. Educación, previsión y salud se erigen como los pilares de los cambios. Las dificultades de liquidez para que el Estado invierta hacen que se recurra a externos cuando se trata de costear los gastos. Así por lo menos lo entendió el gobierno anterior. Eso fue lo que hizo en un tema tan determinante como es la salud.
 
La construcción de hospitales dejada en manos de concesionarias privadas trajo una muy mala salud al país. Tanto que esta semana la ministra del sector, Helia Molina, fue tajante al referirse a varios de esos proyectos concesionados: "Lo mejor es retirarlos" concluyó.
 
¿Qué razones argumentó para dudar de estos trabajos concesionados?: "Me surgen algunas dudas. Las bases de licitación se revisaron en cinco días y son bases que requieren un análisis bien complejo. Por eso estamos haciendo este estudio". Estudio que trata de "una revisión del Contralor y de nosotros, y a la vez, estamos haciendo un cotejo de todo lo que son las bases de licitación y los proyectos arquitectónicos y técnicos junto con una comisión del ministerio de Obras Públicas, que es quien podría hacer objeciones a los proyectos y, a lo mejor, cambiar el destino de ellos", aseveró Molina.
 
Qué paso con los hospitales concesionados
 
Varios hospitales concesionados quedaron con trabajos abandonados y con retrasos excesivos respecto del cronograma pactado. Este, y otro tipo de problemas, son los que enfrentan las obras de, al menos, ocho establecimientos de salud -cuatro consultorios y cuatro hospitales- ubicados a lo largo del país, que en su mayoría fueron ocasionados por problemas financieros que afectan a las empresas constructoras.
 
Un ejemplo es el hospital de Calama donde la quiebra de la firma española Comsa, a comienzos de 2013, derivó en la paralización del recinto con un avance del 62%. Los retrasos fueron confirmados por la subsecretaria de Redes Asistenciales, Angélica Verdugo, quien indicó que se está desarrollando un catastro de la situación de cada una de las obras en ejecución, para definir las acciones que se emprenderán.
 
La subsecretaria opinó que "la situación es compleja. Heredamos una serie de problemas en inversiones hospitalarias y proyectos de atención primaria en el centro, norte y sur del país. Son obras que quedaron en marcha con retrasos y otras abandonadas, para las cuales tenemos que encontrar solución, además de las investigaciones que estamos haciendo en cada caso, con el objetivo de que la comunidad no se vea afectada", explicó.
 
Qué opinan los expertos
 
Enrique Accorsi (PPD), actual consejero del ministerio de Salud, en conversación con Cambio21 se refiere a cómo afrontará el gobierno actual las situaciones de las concesiones: "Pienso que quedó muy claro la política de las concesiones por parte del gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet. No se hará ningún hospital concesionado. Además se pidió a la comisión investigadora de la Cámara de Diputados que se haga cargo de una gran cantidad de irregularidades que presentaron las distintas concesiones que entregó el gobierno anterior".
 
Juan Luis Castro, diputado PS y miembro de la comisión de Salud del congreso, entrevistado por este medio definió la situación: "Se trata de concesiones que vienen desde el gobierno anterior como el Félix Bulnes y Antofagasta que seguirán con sus trabajos. Otras concesiones como Quilpué y Marga-Marga no continuarán con sus labores pues estos hospitales los autorizó el gobierno de Sebastián Piñera entre gallos y medianoche. Por lo mismos estos hospitales no serán validados pues no cuentan con la aprobación de la Contraloría".
 
El exdiputado Accorsi explicó cuáles fueron las anomalías que se encontraron en las concesiones: "Las irregularidades van desde el escaso avance en la construcción de hospitales a pesar de existir fechas de entrega, concesiones entregadas de forma directa, una concesión a una empresa que jamás ha construido un hospital, la entrega de una concesión a un particular, que el valor del metro cuadrado es diferente entre los hospitales, las grandes diferencias entre presupuestos presentados y las entregas de los trabajos y algunos hospitales en que las empresas constructoras han quebrado y no se sabe bien qué pasará".
 
El diputado Castro también se refiere a las irregularidades y afirma que "aquí no es un problema de tener o no privados sino que aquí existen delitos evidentes y flagrantes en donde las concesiones se realizaron de forma dudosa. Como la concesión que se dio a un privado. Son sumas cuantiosas que el ministerio desembolsó a privados por trabajos que nunca se realizaron. Se pagó por no tener resultados en la construcción de hospitales".
 
Enrique Accorsi se refiere a una forma de trabajar que resulta aún más sorprendente:"Algo escandaloso es una forma de trabajo que se basa en estímulos. Llegando a un porcentaje de edificación pactado se entregan estímulos, que son dineros, por lo mismo las empresas no cumplen con el 100% del trabajo para conseguir esos estímulos", finaliza.
 
Juan Luis Castro al ser consultado sobre el futuro de los hospitales afirmó que "aquellos hospitales que quedaron en ‘veremos' por la evaluación del ministerio de Salud serán construidos, solamente falta determinar el cómo. En primera instancia se realizará con fondos públicos. La comisión investigadora que se estableció para determinar las razones de aquellas irregularidades viene a esclarecer los dineros y las concesiones", concluyó.
 
FUENTE: CAMBIO 21

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