Héctor Areyuna | | comenta
En incertidumbre se mantiene el caso luego que las productoras avícolas respondieran a los documentos que la FNE presentó sobre el eventual daño que habrían provocado estos presuntos carteles. Sin embargo, las opiniones de que este es un claro caso de colusión persisten.
Luego de meses de haberse entregado los documentos, la Asociación de Productores Avícolas (APA) y Agrosuper respondieron a los informes que presentó la Fiscalía Nacional Económica (FNE) al Tribunal de la Libre Competencia.
La asociación gremial y la compañía, una de las principales en el rubro, emitieron referatos (informes de respuesta) en los que se critica la falta de evidencia empírica que compruebe la existencia de colusión o de un “cartel”.
Andrés Gómez-Lobo, académico que elaboró uno de los documentos, explicó justamente que este no era la intención del informe, sino detallar la estimación de daño de una eventual colusión: “Nuestro trabajo, que es el único que yo puedo señalar, no pretende probar o demostrar la existencia de colusión, no es el propósito. En cierta forma tienen razón, pero porque no era el objetivo del trabajo, que era estimar daños en caso que se pruebe que efectivamente hubo colusión”, dijo.
El economista de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile agregó que se trataría de daños bastante altos, que ya están detectados: “Si es que se demuestra que hubo colusión y asumiendo que las diferencias de precios que se identifican en nuestro trabajo son causadas por ésta, los daños son bastante altos, básicamente porque es una industria importante, pero además por la larga data de este comportamiento. Estamos hablando de más de una década de comportamiento colusivo, si es que se demuestra, por lo que son daños bastante altos”, recalcó.
Por otra parte, el economista Andrés Solimano dijo que según las reglas de la libre competencia, basta con saber la poca presencia de otras empresas para sospechar de colusión: “No hay que esperar un estudio muy sofisticado para pensar que si hay tres o cuatro productores en un mercado, la probabilidad de que se pongan de acuerdo para fijas los precios o evitar que haya competencia es alta. La autoridad debería estar preocupada de la estructura de los mercados que hay en Chile y toda la evidencia de mercados oligopolísticos”, señaló.
El caso sigue y pese a que la defensa de las avícolas solicita que se haga un análisis exhaustivo del mercado del pollo, quienes se han sumado a las querellas aseguran que se está en frente de una clara colusión.
Así lo aseguró Hernán Calderón, de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios, que consideró lógico “que los productores quieran desvirtuar estos argumentos, pero está más que comprobado por la Fiscalía”.
“Necesitamos que el Tribunal se pronuncie, y cuando se pronuncie vamos a tener resultados de los argumentos que ha esgrimido la Fiscalía para acusar este cartel”, concluyó el dirigente.
FUENTE: RADIO U. DE CHILE
La asociación gremial y la compañía, una de las principales en el rubro, emitieron referatos (informes de respuesta) en los que se critica la falta de evidencia empírica que compruebe la existencia de colusión o de un “cartel”.
Andrés Gómez-Lobo, académico que elaboró uno de los documentos, explicó justamente que este no era la intención del informe, sino detallar la estimación de daño de una eventual colusión: “Nuestro trabajo, que es el único que yo puedo señalar, no pretende probar o demostrar la existencia de colusión, no es el propósito. En cierta forma tienen razón, pero porque no era el objetivo del trabajo, que era estimar daños en caso que se pruebe que efectivamente hubo colusión”, dijo.
El economista de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile agregó que se trataría de daños bastante altos, que ya están detectados: “Si es que se demuestra que hubo colusión y asumiendo que las diferencias de precios que se identifican en nuestro trabajo son causadas por ésta, los daños son bastante altos, básicamente porque es una industria importante, pero además por la larga data de este comportamiento. Estamos hablando de más de una década de comportamiento colusivo, si es que se demuestra, por lo que son daños bastante altos”, recalcó.
Por otra parte, el economista Andrés Solimano dijo que según las reglas de la libre competencia, basta con saber la poca presencia de otras empresas para sospechar de colusión: “No hay que esperar un estudio muy sofisticado para pensar que si hay tres o cuatro productores en un mercado, la probabilidad de que se pongan de acuerdo para fijas los precios o evitar que haya competencia es alta. La autoridad debería estar preocupada de la estructura de los mercados que hay en Chile y toda la evidencia de mercados oligopolísticos”, señaló.
El caso sigue y pese a que la defensa de las avícolas solicita que se haga un análisis exhaustivo del mercado del pollo, quienes se han sumado a las querellas aseguran que se está en frente de una clara colusión.
Así lo aseguró Hernán Calderón, de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios, que consideró lógico “que los productores quieran desvirtuar estos argumentos, pero está más que comprobado por la Fiscalía”.
“Necesitamos que el Tribunal se pronuncie, y cuando se pronuncie vamos a tener resultados de los argumentos que ha esgrimido la Fiscalía para acusar este cartel”, concluyó el dirigente.
FUENTE: RADIO U. DE CHILE
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