martes, 21 de agosto de 2012


Obispo de Temuco llama al gobierno a reactivar Plan Araucanía propuesto por Bachelet ante el fracaso de políticas para el pueblo mapuche

Por Pilar González L
Monseñor Manuel Camilo Vial critica el actuar de gobierno, por querer abordar el tema solamente como algo económico. Mientras que con la ex Presidenta Michelle Bachelet señala que presentaron un Plan Araucanía en el que participó toda la sociedad civil, dejando de lado un poco a los políticos para que no se desvirtuara la discusión.
El conflicto mapuche en La Araucanía sigue generando diversas repercusiones, no solo por la violencia  que se vive, sino por la forma de abordar el problema que tiene el gobierno de Sebastián Piñera.

Frente a ello es que el obispo de Temuco, monseñor Manuel Camilo Vial, realizó una fuerte críticaa la puesta en marcha del llamado Plan Araucanía y la clara falta de voluntad política en lograr el reconocimiento constitucional para el pueblo mapuche. Estas declaraciones las realizó precisamente en la celebración de los 50 años de la Fundación Instituto Indígena.

Fue el diario El Austral, que recogió sus declaraciones donde señaló que "todavía hay medidas parciales, porque éstas deben ser más dialogadas, con participación del pueblo mapuche en las decisiones que se van a tomar en todos los ámbitos y por eso abogo que se entre a una conversación hacia el reconocimiento del pueblo mapuche en la Constitución de Chile, de manera que se pueda hacer responsable de dar soluciones y pistas para este encuentro y realización plena".

En sus declaraciones el prelado manifestó que uno de los puntos fundamentales es la reinstalación del plan presentado originalmente por la ex Presidenta Michelle Bachelet, el cual no estaba enfocado sólo en temas económicos.

Por ello, Vial declaró que "con la ex Presidenta presentamos un Plan Araucanía en el que participó toda la sociedad civil, dejando de lado un poco a los políticos para que no se desvirtuara la discusión. Ella tomó algunas medidas, pero no todas las planteadas porque hubo cambio de gobierno y quedó inconcluso. El nuevo gobierno lo tomó desde el punto de vista económico y este diálogo intercultural quedó pendiente y se redujo solo a lo económico. Hoy me parece importante colocar nuevamente el Plan Araucanía original y complementado para llegar a producir este diálogo y así abordar todos los problemas desde el punto de vista mapuche y huinca".

"El problema mapuche es social y político, no económico como cree el gobierno"

Frente a estas declaraciones, Cambio21 conversó con el ex ministro y actual candidato a alcalde por Temuco Francisco Huenchumilla, quien señaló que "monseñor hace una crítica que va en la dirección correcta porque no se ve efectivamente un plan que vaya al fondo del problema. Pienso que las políticas desarrollistas no van a resolver nunca el problema porque el llamado "conflicto mapuche" no es un tema de pobreza sino político entre el pueblo mapuche y el Estado, de tal manera que eso implica políticas mayores respecto del mundo mapuche y del mundo indígena en general".

"Esto no puede mirarse como algo exclusivamente económico; es un tema cultural, social y sobre todo político. Esta es una deuda que tiene el conjunto de la sociedad y el Estado chileno con el pueblo mapuche. Efectivamente es así porque después de 20 años de democracia y casi tres de gobierno de derecha en el ámbito político no hemos avanzado prácticamente nada, porque el reconocimiento constitucional está pendiente del año 90 y como no hay acuerdo con la derecha para las mayorías necesarias, eso sigue entrampado, agregó el ex ministro.

Por su parte, el diputado René Saffirio dijo a Cambio21 que "la verdad es que el obispo Vial tiene razón con cuando critica el plan porque de hecho el plan no existe. Es una entelequia financiera presupuestaria y administrativa que no existe como plan propiamente tal sino que son distintas partidas del presupuesto fiscal a las que se les asigna recursos, se ejecutan proyectos y se le pone el logo de Plan Araucanía 7".

"En las dos últimas discusiones de la ley de presupuesto, he pedido que se me explique en qué partidas del presupuesto están los recursos del Plan Araucanía y nunca han podido hacerlo ya que ni el gobierno sabe qué partidas son. Se creó solo una partida llamada "gobierno regional" de 12 millones de dólares, de tal forma que el Plan Araucanía en términos objetivos, no existe".

El parlamentario señala además que "el gobierno está absolutamente convencido, y se lo hemos dicho millones de veces,  que la situación de conflicto que existe con el pueblo mapuche se soluciona por la vía de politicializar y judicializar los temas. El gobierno no quiere entender que este es un conflicto político, y que tiene que ser abordado como tal, este no es un conflicto social, tiene una dimensión étnica, económica, política e incluso de carácter religioso. Después que Cornelio Saavedra hizo todas las barbaridades que hizo en lo que se llamó la pacificación de la Araucanía escribió una carta en que reconoció que el conflicto mapuche en la época no tenía una solución militar sino que política, pero parece que la gente del actual gobierno no tiene ninguna disposición a reconocer la historia", concluyó.

El enojo del Obispo por el trato al pueblo mapuche

Pero esta no es la primera vez que el obispo de Temuco se manifiesta públicamente por el conflicto mapuche. Hace algunos meses, monseñor Vial, señaló que se necesitan políticas que aborden la real problemática y que recojan el tema de la interculturalidad en Chile. Además, destacó el aspecto pacífico de esta comunidad ante las consultas por los hechos de violencia, agregando que existe un gran desconocimiento sobre este pueblo.

"Yo vengo insistiendo, mucho años, de que aquí necesitamos políticas que aborden la problemática mapuche. La problemática no es sólo entregar tierras", señaló.

Respecto del desafío de las autoridades frente a este conflicto, el religioso señaló que ha conversado con los gobiernos durante los 12 años que lleva en Temuco "tratado de imbuir esta idea: conozcamos al pueblo mapuche. No vayamos a solucionar sólo problemas prácticos, sino que entendamos y respetemos al pueblo mapuche, porque el problema más grave es que el pueblo mapuche desconfía absolutamente de nosotros y nosotros desconfiamos del pueblo mapuche. No nos conocemos".

En este sentido, destacó la necesidad de crear un ambiente de confianza para hablar los verdaderos problemas, considerando que se trata de una cultura que es diferente y que piensa distinto sobre el derecho, la tierra y la persona humana.

"Ese ambiente es el que yo peleo siempre para llegar a solucionar los verdaderos problemas. Esto no se soluciona con más plata, más carabineros, al contrario. Cómo es posible que tengamos que ir armados como a una guerra para tratar estos temas de seguridad y llevar a la familia, a las mujeres, a los niños",reflexionó en esa oportunidad.



FUENTE:CAMBIO21

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