miércoles, 10 de diciembre de 2014

Los patrones insostenibles de producción y consumo agudizan los desequilibrios sistémicos y la degradación del medio ambiente. Foto: TÉLAM
LIMA.—La ministra de Ciencia, Tecnología y Medio ambiente de Cuba, Elba Rosa Pérez, aseguró en Lima que se requiere voluntad política real de los países desarrollados para el enfrentamiento efectivo del cambio climático.
Ellos han sido los máximos contaminadores históricos y disponen de capacidades tecnológicas, in­fraestructura y recursos financieros necesarios para ello, aseveró Pérez durante su intervención en el segmento de alto nivel de la 20 Con­ferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP20).
Al mundo en desarrollo, dijo, no se le pueden transferir las responsabilidades, tenemos derecho a un futuro próspero y nuestras prioridades son erradicar la pobreza y al­canzar el desarrollo sostenible, re­porta PL.
Nos preocupa la intención sostenida por algunas naciones desarrolladas durante las sesiones, dirigida a desconocer los principios que sustentan la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Cli­mático. El apego al multilateralismo debe continuar siendo un pilar en este proceso, manifestó.
La Ministra dijo que el archipiélago cubano, ubicado en el Caribe, comparte con muchos estados in­sulares los mismos problemas am­bientales heredados y el cambio climático lo agravará.
Reiteramos la firme disposición de seguir implementando acciones de adaptación y mitigación. No obs­tante al ilegal bloqueo de Es­tados Unidos hacia la Isla, nuestra voluntad es compartir lo que conocemos y hacemos con el resto de la humanidad, recalcó Pérez.
Indicó que el cambio climático compromete el futuro de la especie humana y lesiona el desarrollo sostenible, y por ello “reclamamos soluciones urgentes y con coherencia”. Señaló que Cuba se asocia a las intervenciones del presidente de Bolivia, Evo Morales, en representación del grupo de los 77 y China; y de Divavesi Waqa, presidente y jefe de Estado de la Repú­blica de Naru, a nombre de la Alianza de los Pe­queños Estados Insulares.
El nuevo acuerdo global a que aspiramos el próximo año debe respetar los principios y disposiciones de la Convención y su Mandato. No solo hay que preservar el compromiso del enfrentamiento global cuando el mundo continúa bajo un orden económico, financiero, y de comercio profundamente injusto y desigual, manifestó la funcionaria.
Los patrones insostenibles de producción y consumo, ahora a nombre de la globalización, agudizan los desequilibrios sistémicos y la degradación del medio ambiente, advirtió.
“Le corresponde a la comunidad internacional buscar las soluciones, sobre la base de nuestras responsabilidades comunes pero diferenciadas”, concluyó Pérez.

FUENTE: GRANMA

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