Frente Amplio Unitario

Censo Abreviado: para saber cuántos somos nos tendremos que juntar de nuevo el 2017

10/06/2014 |

Por Verónica Romero

La última medición que se realizó en Chile no tuvo los resultados esperados y se hará un nuevo censo en 2017, esta vez de manera abreviada. En entrevista con Cambio21 expertos explican lo que esto significa.

El censo es la estadística que describe el recuento de individuos que conforman una población, sobre la que se realiza una serie de observaciones y opera sobre el total de la urbe, aunque la manera en que se realiza tiene que ver con los objetivos que se persiguen.

 

Estas mediciones, para las políticas públicas más detalladas, como las comunales, requieren una información particularizada que no puede obtenerse por medio de encuestas.

El censo que se realizó en 2012 en Chile, tuvo un cambio en la manera en que se hizo la medición, lo que trajo varios problemas, ya que ni siquiera se tuvo una muestra real de cuántos habitantes hay en el país, a raíz de esto, es que el gobierno de Michelle Bachelet decidió hacer un nuevo muestreo para el 2017.

La fe pública comprometida

Usualmente en Chile, como en los países desarrollados, "se realiza un "censo de hecho", que consiste en hacerlo en un día y que se decreta feriado, en que la gente está en su casa y, donde en general, los empadronadores son una gran cantidad de personas no rentadas. La única excepción fue la del 2012, en que se intentó levantar un "censo de derecho" en que se realizó en un periodo de tres meses más o menos y que tiene características distintas, desde el punto de vista del diseño, del operativo", según explicó a Cambio21, Juan Carlos Feres, presidente de la Fundación para la Superación de la Pobreza.

En cuanto si es necesario realizar un nuevo censo en Chile, el Doctor en Estadística y profesor de la Facultad de Matemáticas de la Universidad Católica, Guido del Pino, comentó a Cambio21 que "me parece que particularmente por problemas de fe pública, sería difícil no hacer un nuevo censo".

Sobre esto, Feres comentó que "si uno se atiene a los análisis que han derivado de los expertos, parece clara la conclusión de que los resultados del censo 2012 no cumplen con el estándar básico como para ser utilizado para los propósitos más elementales y fundamentales que tiene un censo en políticas públicas y frente a una realidad de ese tipo no queda otra alternativa que programar la realización de uno nuevo, que por cierto todos esperamos, no incurra ni de lejos en los mismos problemas que en definitiva afectaron al anterior".

Con respecto a si es se puede extraer información útil del censo anterior, Guido del Pino dijo que "es factible, aunque para ello hay que hacer un análisis estadístico muy experto".

 

Evitar errores del 2012

 

En cuanto al censo abreviado, el PhD Del Pino expuso que "es un censo con muy pocas preguntas y probablemente se preocupará de variables más demográficas como género y localidad".

Juan Carlos Feres declaró que "no hay mayor diferencia con el no abreviado. La condición se aplica a la extensión del cuestionario, no va a contener todas la preguntas que se habían incorporado en el operativo anterior, va a ser más breve y eso significa que el proceso de levantamiento de la información, a nivel individual y de cada hogar, toma menos tiempo y, por lo tanto, es más rápido, pero proporciona menos información que la que en general ofrecen los censos de población y vivienda cuando se hacen bajo las condiciones estándar".

Para evitar los errores que se cometieron en el censo del 2012, los expertos coinciden en que es necesario hacer una programación como corresponden.

"Se están estableciendo los cronogramas y los tiempos que de alguna manera garantizan que se van a poder cumplir a cabalidad cada una de las etapas que comprenden el proceso censal", dijo Feres.

Lo más importante a tener en cuanta cuando se realizan este tipo de mediciones, según Guido del Pino, es "el hacer un precenso y cosas que no tienen mucho que ver con la medición en sí. Más bien hay que tener bien identificada la cantidad de viviendas, porque puede ser que algunas no sean censadas, como al parecer pasó la vez anterior".

Para Juan Carlos Feres, "el censo es uno de los operativos más complejos que puede levantar una oficina de estadística y por lo mismo tiene que enfrentar muchísimos aspectos en la programación, el diseño y después en la implementación. Es un asunto delicado, complejo que demanda una gestión técnica especializada de gran calidad y que no sólo involucra a los técnicos, sino que también hace participar a distintas agencias que requieren información que debe ser recogida como parte de este levantamiento censal".

Con el anuncio del gobierno de realizar un censo abreviado, no queda claro cuáles serán los tiempos a seguir para volver a realizar esta medición. Según Juan Carlos Feres, "Chile tuvo por muchos años el levantamiento en los años terminados en cero, como es la recomendación internacional, aunque los últimos cambiaron a los terminados en dos. Si se piensa en un censo para abril de 2017, se puede pensar que el siguiente censo completo se levante el 2022".

Con respecto a esto, Guido del Pino manifestó "me parece que habría uno del 2022. La idea pareciera sacar un censo cada cinco años, de manera abreviada. Dado esto, si el próximo censo se considera así, me parece que el 2017 debiera ser".

Sobre el costo que tiene el realizar una medición como esta, ambos expertos vuelven a coincidir en no dar un número, ya que sería irresponsable, pero sí establecen que se trata de una cifra muy alta y que es el Instituto Nacional de Estadística (INE) quien debe tener este tipo de datos, ya que dispone como referencia el presupuesto del censo anterior.

 

FUENTE: CAMBIO 21