Dirigentes estudiantiles se pronuncian sobre acciones de los encapuchados en las marchas y buscan una solución concreta y eficaz
Por Paloma Cabello
Con más de 150 mil manifestantes se evaluó la asistencia a la marcha convocada por los estudiantes universitarios de la Confech. Los jóvenes realizaron diversas expresiones culturales dando apoyo a las demandas estudiantiles. Sin embargo, externos al movimiento intentaron empañar la fiesta haciendo destrozos al cierre de la actividad.
Con más de 150 mil manifestantes se evaluó la asistencia a la marcha convocada por los estudiantes universitarios de la Confech. Los jóvenes realizaron diversas expresiones culturales dando apoyo a las demandas estudiantiles. Sin embargo, externos al movimiento intentaron empañar la fiesta haciendo destrozos al cierre de la actividad.
Pasadas
las 10 de la mañana comenzaron a juntarse decenas de estudiantes desde
la Plaza Baquedano, iniciando así la marcha permitida por las
autoridades que recorrería desde la Alameda hacia la calle Mac-Iver,
pasando por José María Caro y culminando en un acto en la Estación
Mapocho, donde los líderes estudiantiles se dirigieron a los asistentes.Con carteles como "Te adoctrinaron para obedecer. ¿Aprendiste? ¿Y quieres educación gratuita solo para cambiar de clase? ¡La gratuidad no basta!", estudiantes universitarios se adherían al movimiento a medida que iban llegando hasta el lugar de encuentro.
Con un lienzo gigante de color blanco y letras azules se vió a Giorgio Jackson y otros rostros liderando la marcha. "No hay Revolución Sin Educación Pública-Gratuita- De calidad" firmado por la Revolución Democrática, movimiento creado y encabezado por el ex presidente de la FEUC.
Una marcha estudiantil que generó gran aceptación por parte de los estudiantes, con una participación de más de 150 mil personas según los últimos cálculos y que no dejó indiferente a nadie. A pesar de lo nublado del día, las calles del centro se llenaron de colores, música y distintas manifestaciones como cuerpos pintados, batucadas y consignas que explicitaban el descontento hacia el manejo del gobierno.
"Se va a acabar, y va a caer, la educación de Pinochet", eran algunas de los cánticos que se escuchaban desde las calles aledañas al paso del movimiento. Además de las ya conocidas pancartas y banderines de colores que embellecen la marcha.
Sin embargo, una vez más se pudo presenciar que grupos de encapuchados, que ciertamente no tienen nada que ver con las demandas y convicciones del movimiento, se enfrentaron a carabineros. Como consecuencia, seis uniformados lesionados, tres civiles alcanzados por balines y destrozos múltiples en la vía pública mancharon el acto.
La Intendencia de Santiago en conjunto con Carabineros realizó un plan de contingencia para que no sucedieran estos hechos, pero no fueron suficientes.
Para la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, algunas acciones de Carabineros potencian la violencia. "Como estudiantes nos reunimos con Carabineros y los vecinos del sector para tomar medidas, por ejemplo, hacer contención entre los mismos estudiantes para guiar la marcha y le pedimos a carabineros que eliminara el uso de balines de pintura. Pero finalmente esta medida no se cumplió".
"El tema de los encapuchados es una problemática muy discutible y se debe seguir analizando. Como organización hemos tratado el hecho, pero al final del día esto no nos ayuda", dijo Sebastián Donoso presidente de la Feusach.
Cuando ya pasaban de las 14 horas la policía montada vigilaba los alrededores para evitar contiendas con encapuchados. Carabineros organizados en masa se desplazaban para controlar los disturbios que ya comenzaban a empañar el acto. Minutos más tarde el escenario era otro. Balines, bombas lacrimógenas y destrozos en paraderos y señaléticas hacían ver que jóvenes exentos del movimiento realizaban lo que por ignorancia saben hacer.
Para los dirigentes de la Confech se cumplió el propósito que demuestra cuan firmes están aún las demandas que persiguen estas manifestaciones culturales, las mismas nacidas hace dos años con otros rostros pero igual convicción.
El sentido de la marcha "es comenzar a construir", expresó la Confech.
Quien también fue invitado a la marcha estudiantil fue el ex presidente de la Feusach, Camilo Ballesteros, quien la catalogó de "magnífica y acorde a las expectativas". Con respecto a los desmanes acontecidos al finalizar el acto dijo que "no basta con decir que los encapuchados son un problema de las marchas. Hay una serie de grupos que ocupan distintos escenarios para generar destrozos, no solo en el movimiento estudiantil".
Para el Colegio de Profesores el balance también fue positivo, no sólo por el número de asistentes sino también porque el mensaje una vez más se ha logrado, entregando un movimiento estudiantil transversal, teniendo la participación de más de siete organismos en apoyo a las demandas en educación.
Terminada la convocatoria, dispersados los asistentes y declaradas las evaluaciones por parte de la Intendencia y los participantes, se obtuvo un balance positivo: se terminó con la presencia de saqueadores y bombas molotov. Este logro se debió, en gran parte, a la petición realizada por los estudiantes a carabineros de mantener distancia durante el acto para no provocar.
FUENTE: CAMBIO 21
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