"Le pedimos al secretario general, Mario Desbordes, que hiciera ver (al gobierno) que lo de la reunión en Recoleta había sido un poco pasado de rosca, mientras que a Allamand se le pide mucha mesura", sostuvo el senador oficialista. Reclamo que llegó ayer a la oficina de partes del Palacio.
El presidente de Renovación Nacional, Carlos Larraín, confirmó que su colectividad envío ayer una carta al Palacio de La Moneda donde critican la participación del ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, en un desayuno con mujeres en Recoleta. Acto que fue organizado por la alcaldesa UDI, Sol Letelier.
En la misva se exige a las autoridades de gobierno que se cumpla el instructivo presidencial que prohíbe a los funcionarios participar en actividades proselitistas en horarios de trabajo.
En entrevista con Radio Agrícultura, el senador oficialista señaló que se trató de un “tibio y educado rezongo”, agregando que “yo no vi la carta ni la redacté, pero sí le pedimos al secretario general, Mario Desbordes, que hiciera ver que lo de la reunión en Recoleta había sido un poco pasado de rosca, mientras a Allamand se le pide mucha mesura”.
En esa línea, aseguró que en la cena de celebración de los 25 años del partido no hubo una proclamación al ministro de Defensa, Andrés Allamand. En esa línea pidió al Ejecutivo que “raye la cancha”.
“Nadie lo proclamó, nadie habló de elecciones, nadie dijo nada, sólo queremos nosotros que la cancha sea pareja, y tenemos que batallar por quien ha sido uno de los nuestros. Esto otro que ocurrió en Recoleta me pareció que era un paso más allá, por eso reclamamos un poco, si tampoco es que nos hayamos enojados o estemos gritando”, apuntó Larraín.
Haciendo hincapié en que Allamand “está en una cierta desventaja, por lo mismo parece prudente que otros se moderen, eso es lo que hemos pedido”.
Al ser consultado por los resultados de la encuesta CEP, Larraín “ha habido un empeño muy feo, muy institucional de socavar la persona” de Sebastián Piñera.
Por ello, llamó a la oposición a “que por favor dejen tranquila a la persona del Presidente de la República porque se está generando un ambiente institucional que ellos quizás hereden, y la propia Michelle Bachelet podría hacer un muy buen servicio a su país volviéndose a Chile a poner orden entre su gente, y a pedir esa calma que a nosotros nos pedía cuando éramos oposición”.
Y pidió que el quipo comunicacional del Gobierno termine con su intento de que el jefe de Estado tenga una buena llegada con todos los sectores. “Respecto de los que asesoran les diría que cambien de línea de trabajo, no traten de complacer a todo el mundo, incluso a los que están culturalmente en el polo opuesto, porque eso induce a mucha gente a desconfiar. Da frustración. Yo sólo veo resultados malos en esto de hacerlo más tibiecito para la opinión pública, han fracasado en eso”, indicó.
“Terminemos con ese empeño en el segundo piso de hacer de él una especie de Papá Noel o viejo pascuero, no es esa su línea de trabajo, no es lo que mejor se le da”, concluyó.
FUENTE: EL MOSTRADOR
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